Recuerda que cuando se trata de frutas con cáscara comestible o no comestible, sí es recomendable pasarlo primero por el agua para eliminar cualquier resto de tierra o suciedad. (ESPECIAL)
A la hora de la preparar la comida, la higiene en todo el proceso, desde la elaboración hasta en los ingredientes, es fundamental.
Una de las cosas que hacemos más, es tratar de lavar o desinfectar todos nuestros alimentos antes de siquiera pensar en consumirlos, a pesar de eso, existen productos que no necesitan ser enjuagados o que incluso hacerlo resulta perjudicial, no solo para el sabor, sino para nuestra salud.
Un ejemplo es con todo tipo de carne o producto de origen animal, ya que la forma más segura de comerlos es cocinándolos.
Pero siempre hemos escuchado que cuando se trata de productos naturales, lo mejor es lavarlos con agua y jabón o incluso con desinfectante especial; sin embargo, existen productos que debido a su consistencia o a la manera en que han sido procesados para su venta, ya no necesitan ese paso.
De acuerdo con la Organización de Consumidores y Usuarios de España, institución reconocida internacionalmente y encargada en garantizar los derechos del consumidor, estas son algunas de las verduras que no necesitan lavarse antes de comerlas.
La lechuga, o ensalada en bolsa, ya se ha sometido a un proceso de desinfección cuando fue empaquetada, por lo que hacerlo de nuevo incluso podría resultar contraproducente al contaminarse con microorganismos que se encuentran en el lavabo.
Las verduras u hortalizas envasadas tiene el mismo proceso que los productos en bolsa, incluso cuentan, en la mayoría de las veces, con tecnología de envasado al vacío por lo que es casi imposible que contengan microorganismos contaminantes.
Estos productos están cosechados y diseñados para que estén listos para cocinarlos o comerlos directo del empaque.
En general los alimentos congelados se deben descongelar a temperatura ambiente para no romper la cadena de frío que puede echar a perder los alimentos. Así que no cometas el error común de querer aplicarles agua para acelerar el proceso, porque esto puede contaminar al producto y cambiar su sabor.
Las setas u hongos comestibles suelen venir con mucha tierra, pero en estos casos sólo se recomienda limpiarlos con un trapo húmedo o con un cepillo, o bien recortarles las zonas más sucias.
Ya que lo hongos absorben mucho los líquidos, si los lavas puede que pierdan sabor, aroma y nutrientes.
Recuerda que cuando se trata de frutas con cáscara comestible o no comestible, sí es recomendable pasarlo primero por el agua para eliminar cualquier resto de tierra o suciedad.