El alcalde Jorge Zermeño afirmó que no se busca 'perjudicar a nadie'; por el contrario, señaló que se trata solamente de 'ajustes inflacionarios' en el 87 por ciento de los casos. (ARCHIVO)
Luego del ajuste al alza en valores catastrales, mismo que se aprobó por el Cabildo de Torreón en sesión extraordinaria el jueves por la tarde, el alcalde Jorge Zermeño afirmó que no se busca "perjudicar a nadie"; por el contrario, señaló que se trata solamente de "ajustes inflacionarios" en el 87 por ciento de los casos, siendo solamente un porcentaje menor quienes deberán cubrir aumentos de hasta el 10 por ciento en el Predial en 2021.
La propuesta de los ajustes al alza en valores catastrales fue aprobada por mayoría y en medio de polémica de parte de ediles de las diversas fracciones.
"No son ocurrencias, se trata de una propuesta técnicamente estudiada, donde participan todas estas instituciones empezando por el Gobierno del Estado, las áreas correspondientes empresariales y el Ayuntamiento.
"¿Qué es lo que se está haciendo? Como se ha dicho reiteradamente, pues ajustar los valores a la inflación. La ley señala que los valores catastrales deben acercarse a los valores comerciales, cosa que andamos muy lejos en Torreón de llegar a esta posibilidad. Estamos muy por debajo de ciudades similares como Chihuahua, Durango, Saltillo, Monclova, muchas ciudades que tienen valores más ajustados a la realidad, bueno, pues eso es lo que se está haciendo".
Recordó que la propuesta de "ajustes inflacionarios" se realizó junto con otras autoridades y hasta organismos empresariales, lo que descarta la noción de que se trata de un proyecto unilateral y que tenga intenciones únicamente de recaudación de recursos.
Además criticó la postura de los ediles de Morena y del PRI, mismos que acusaron a la actual Administración de perjudicar a la ciudadanía con las alzas en las tarifas catastrales; los llamó a tener congruencia y tener la misma "vehemencia" para realizar esos mismos llamados de atención al Gobierno federal, responsable de constantes recortes presupuestales desde el año pasado, principalmente en el tema de las llamadas participaciones y realizando altos cobros mediante la Comisión Federal de Electricidad (CFE).