Su familia exige justicia a las autoridades. (INTERENT)
Un nuevo caso de brutalidad policiaca ha llamado la atención en los Estados Unidos.
Los hechos ocurrieron en Los Ángeles, California, donde un joven de 21 años recibió 7 disparos por parte de un oficial de policía en la espalda, luego de que comenzara a correr por miedo al ser apuntado con un arma.
Andrés Guardado de 21 años de edad se encontraba a las afueras de una tienda, donde trabajaba como guardia de seguridad.
Los oficiales se acercaron a él, pues lo vieron 'sospechoso' y al notar que portaba un arma, le apuntaron, por lo que él corrió para esconderse.
"Teníamos un guardia de seguridad que estaba al frente porque habíamos tenido ciertos problemas con el etiquetado de personas y cosas así. Y luego apareció la policía, y le apuntaron con sus armas y él corrió porque tenía miedo, y le dispararon y lo mataron. Tiene un historial limpio y todo. No hay razón", comentó su jefe, el dueño de la tienda en la que laboraba.
"Era un buen hombre. Lo iba a lograr en la vida. Lo iba a lograr y se convertiría en un buen hombre profesional en la vida, pero se lo quitaron a mi familia y a mí. Mis padres están completamente destruidos. Ya estamos todos muertos por dentro", declaró su hermana a medios locales.