Presuntos líderes del CJNG y señalados por el atentado contra García Harfuch fueron trasladados a un penal federal.
Debido a que el Gobierno capitalino lo solicitó y luego de una larga coordinación con autoridades federales, la madrugada del miércoles y bajo un fuerte dispositivo de seguridad José Armando "N", "El Vaca", presunto jefe de sicarios del "Cártel Jalisco Nueva Generación", señalado como autor material del atentado contra el secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, fue trasladado a un penal federal.
Junto con él llevaron a otros miembros de cárteles locales, entre los que destacan Roberto Esparza Moyado, "El Betito" y Óscar Andrés Flores Ramírez, "El Lunares", líderes de la estructura denominada "La Unión Tepito"; así como David García Ramírez, "El Pistache", segundo al frente de los tepiteños, y Juan Balta, señalado como uno de los principales distribuidores de drogas en las alcaldías Iztacalco e Iztapalapa, quien es aliado también de este grupo de la delincuencia organizada.
Junto con estos capos, 19 detenidos vinculados al "Cártel Jalisco Nueva Generación" e imputados en el atentado que sufrió el jefe policiaco también fueron trasladados a centros penitenciarios federales, sin que se revelaran detalles.
Se sabe que fueron distribuidos entre los estados de Sonora, Oaxaca y Chiapas. Además, es de destacar que estos cambios fueron autorizados por el Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social.
Sobre estos cambios, la mandataria local, Claudia Sheinbaum Pardo, expuso: "Son decisiones que se toman desde el gobierno federal también, desde el gabinete de seguridad e inteligencia del Gobierno de México y ellos tendrían que informar. Son decisiones que se toman conjuntamente para seguridad de la Ciudad y en general del país".
Desde 2018, fecha en la que el líder visible de "La Unión Tepito", "El Betito" fue capturado, el gobierno capitalino ha intentado en al menos cuatro ocasiones enviarlo a un Cefereso; sin embargo, en tribunales Roberto Mollado burló a la justicia y logró permanecer en el Reclusorio Oriente, con todos sus secuaces, y desde ahí, según las investigaciones locales, seguía ordenando a los de Tepito.
En total fueron 15 internos del Reclusorio Sur; cinco, del Reclusorio Norte; uno, del Centro de Alta Seguridad conocido como Diamante, y cuatro del Reclusorio Oriente, todos considerados de alta peligrosidad y con un perfil criminal que no encajaba en el sistema penitenciario local, pues no cuenta con las condiciones para contenerlos.