Los padrastros en las manos generalmente tienen lugar debido a resequedad o falta de hidratación. (ESPECIAL)
Los padrastros en las manos generalmente tienen lugar debido a resequedad o falta de hidratación.
Pueden ser muy dolorosos, causando enrojecimiento, ardor y un aspecto muy descuidado. Por lo general aparecen en personas que se muerden las uñas, que trabajan con productos químicos, lavan trastes sin guantes o por falta de especial hidratación en el invierno.
Para eliminarlo puedes seguir los siguientes trucos caseros:
Aceite de oliva
Puedes ponerte unas gotas de aceite de oliva en los dedos donde tengas padrastros. El aceite dará mucha hidratación, además servirá para suavizar la piel levantada y ayudará a acelerar su curación.
Agua y aceite
Puede sumergir los dedos en una mezcla de agua y aceite de oliva y dejarlos por lo menos 15 minutos hasta que la piel se haya ablandado lo suficiente. Empuja las cutículas hacia adentro con la ayuda de una espátula para manicura o un palito envuelto con algodón empapado de esta mezcla (en cualquiera de los dos casos).
Hidratación
Es importante que hidrates tus manos por lo menos tres veces al día. Utiliza una crema especial para piel reseca. Te ayudará a suavizar y remover los padrastros con facilidad.
No muerdas tus uñas
Pon especial atención a este punto, ya que si lo haces, ningún otro remedio será efectivo. Tampoco debes cortar ni arrancar los padrastros, ya que corres el riesgo de que la herida se termine infectando.
Si necesitas eliminar de urgencia un padrastro, por apariencia o porque se ha corrido más, limpia la zona con agua tibia y jabón neutro para evitar problemas cutáneos. Recorta la piel levantada con las tijeras adecuadas. Vuelve a lavar con agua y jabón o desinfectarlas con algodón y pon crema antibiótica. Si hay sangre consulta si puedes poner esa crema o es necesario que cicatrice primero.
Es importante no olvidar el uso de guantes para realizar cualquier tarea que implique estar en contacto con alguna sustancia química, desde el desengrasante para trastes, cloro, o alguna sustancia que utilices en tu trabajo.
Aunque aparezcan heridas sin importancia, más allá de la apariencia pueden causarte serios problemas si se infectan. Si notas que la zona está roja, inflamada o caliente, hay una infección y es importante acudir al médico.