Inolvidable. Pese a la controversia, el cantante español ofreció un concierto brillante y lleno de éxitos.
El concierto ofrecido el pasado sábado por el cantante español Raphael en un pabellón multiusos de Madrid generó debate y polémica en las redes por celebrarse con cerca de cinco mil asistentes, cuando el contagio de la COVID-19 repunta en España y se restringen las relaciones sociales.
El WiZink Center, donde cantó el artista internacional, aseguró este domingo en un comunicado que se cumplieron todas las medidas exigidas para la celebración del evento, e incluso, se duplicó el espacio obligatorio entre butacas.
El teatro sale al paso así de la polémica generada en las redes sociales sobre la decisión de celebrar un evento multitudinario en un espacio cerrado cuando se acaban de limitar las reuniones familiares de Navidad a seis personas de dos núcleos diferentes.
El centro asegura que "se abrió para la ocasión extremando las medidas de seguridad sanitaria para iniciar así la recuperación de la música en vivo, trasladando a la sociedad el mensaje de que la cultura es segura".
La presidenta regional de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también aseguró a la prensa que el espectáculo se celebró con "todas las medidas de seguridad", aunque anunció que, si sube la incidencia del coronavirus, "se suspenderán todos los eventos de las mismas características".
El recinto "ha respetado el aforo limitado del 30 por ciento, renueva el aire cada 12 minutos y ha cumplido con toda la normativa anticovid", explicó el lugar en la misiva enviada a la prensa.