El huevo es un alimento con un alto contenido de proteína, lo cual implica un gran contenido de aminoácidos esenciales que no pueden ser producidos por humano. (ARCHIVO)
El huevo es un alimento con un alto contenido de proteína, lo cual implica un gran contenido de aminoácidos esenciales que no pueden ser producidos por humanos.
La proteína que contiene es de gran ayuda para desarrollar y mantener el músculo, mientras que por otro lado es capaz de mantener la sensación de saciedad, dos factores muy importantes en el factor del peso corporal.
Los huevos son también una amplia fuente de vitamina D y colina, el cual es un nutriente que ayuda a proteger contra los defectos de nacimiento en los niños. Contienen vitamina A, B12, riboflavina (B2), selenio (antioxidante), luteína y zeaxantina que ayuda a la salud ocular.
La mayor cantidad de calorías y grasa del huevo se encuentra específicamente en la yema.
Existe la creencia de que este alimento dispara los niveles de colesterol en la sangre, sin embargo, la yema, que es donde se concentra la grasa, tiene un bajo contenido en grasa saturada, la cual es la culpable de elevar estos niveles.
En un reciente metaanálisis se comprobó que el consumo de huevo incluso más de uno al día, no está asociado con enfermedades del corazón. También, un estudio finlandés del 2016 comprobó que no incrementa el riesgo de padecer enfermedad corona arterial, ni siquiera en aquellos predispuestos a sufrirla.
Lo que puede afectar cómo recibes estas propiedades es cómo está cocinado el huevo. Un huevo grande ponchado o escalfado tiene 71 caloría, 2 gramos de grasa saturada, también los omelet con espinacas son una buena opción.
Sin embargo, unos huevos benedictinos con tocino y salsa holandesa tienen aproximadamente 800 calorías y 26 gramos de grasa saturada.