Con 290 votos a favor y 71 en contra se avaló la reforma a la ley y se turnó al Senado
El pleno de la Cámara de Diputados aprobó la reforma legal que permitirá al Gobierno la compra directa de medicamentos e insumos médicos en el extranjero, lo que incluirá en el futuro la vacuna contra el COVID-19.
Con 290 votos a favor y 71 en contra se avaló la reforma a la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público y se turnó al Senado.
Durante la discusión se presentó una modificación en la adición al artículo primero, que da todavía más discrecionalidad en las operaciones que se realicen.
Se eliminó la redacción en la que se señalaba que la compra tendría que ser autorizada por la Secretaría de Hacienda, a través de la Oficialía Mayor, y que acudir al exterior se asumiera como una opción, no como la regla.
"Queda exceptuada de la aplicación de la presente ley, la adquisición de bienes o prestación de servicios para la salud que contraten las dependencias y entidades con organismos intergubernamentales internacionales, a través de mecanismos de colaboración previamente establecidos, siempre que se acredite la aplicación de los principios previstos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos", indica la nueva redacción avalada por el pleno.
En el dictamen original, se señalaba que, si después de una investigación de mercado se concluía que la licitación no era la vía idónea para asegurar al Estado las mejores condiciones de compra, las dependencias y entidades "podrían" hacer las contrataciones con los organismos intergubernamentales internacionales, previa autorización de Hacienda.
En tribuna, el presidente de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción, Oscar González Yáñez, afirmó que con la reforma se romperá el monopolio de las medicinas en México y que el Gobierno podrá comprar en mejores condiciones.
"Sé que muchos empresarios de la industria farmacéutica, de las medicinas, han hecho comentarios en diversos medios de comunicación planteando su desacuerdo con esta iniciativa. ¿Ustedes conocen a un empresario de la medicina pobre?", cuestionó.
Lo que sí hay, dijo, son millones de pobres en México que no tienen la medicina para ser atendidos y que la reforma busca revertir eso.
La diputada Martha Elisa González, del PAN, señaló que la reforma avala las compras discrecionales en el extranjero, pero advirtió que eso no resolverá el problema del desabasto de medicamentos que se ha agudizado en el actual Gobierno.
"Con esta reforma pretenden legalizar las acciones que ha realizado este Gobierno por falta de orden, liderazgo y planeación en el abasto de medicamento, vacunas y demás insumos para la salud, comprando de forma discrecional, sin cumplir con los tratados internacionales que ha firmado México en esta materia", acusó.
Señaló que la reforma tampoco resolverá el incumplimiento de los procedimientos de licitación y transparencia, así como los criterios de competencia entre diferentes proveedores.
Ximena Puente, diputada del PRI, adelantó que su bancada sí aprobaría la reforma para que no haya pretextos sobre el desabasto de medicamentos.
"Ya no tendrá pretextos para garantizar medicamentos a las personas que padecen cáncer, diabetes, enfermedades cardiovasculares, VIH, entre otras. Además, podremos contar con oportunidad con la vacuna del coronavirus cuando esté lista en el mundo. La salud de las y los mexicanos es un tema prioritario", señaló.
Agregó que el Gobierno no puede convertir la excepción en una regla o práctica cotidiana ni tampoco violentar acuerdos comerciales en que México ha suscrito con diversos países.
El diputado Mario Alberto Rodríguez, de MC, aseguró que no hay justificación alguna para la reforma, porque las adjudicaciones directas ya se podían realizar con la ley actual.
Raymundo García, del PRD, indicó que al exceptuar la licitación en compras en el exterior se promueven las adquisiciones irregulares y se extiende la opacidad.