Pyke eventualmente admitió su culpabilidad de éste y otros robos. (INTERNET)
Un ladrón fue rastreado por la policía gracias a su error de dejar una mochila con su nombre y dirección en la escena de un crimen.
En marzo pasado, Malcolm Pyke, de 43 años, irrumpió en un garaje en East Herrington, Sunderland, en Inglaterra, y robó equipo de limpieza con valor de 150 libras, 4 mil pesos, reporta Sky News.
Mientras escapaba, accidentalmente dejó una bolsa que contenía grabados su nombre y dirección. La información permitió a la policía ir a su casa, donde encontraron el equipo robado.
“Malcolm Pyke es un ladrón prolífico que ha demostrado constantemente su desprecio por la ley y el bienestar de los demás. Desafortunadamente para él, su última ofensa que fue bastante poco sofisticada lo vio dejar atrás una serie de artículos personales que dirigieron a los oficiales directamente a la puerta de su casa", dijo el sargento detective Chris Raper-Smith.
El equipo robado fue devuelto a su dueño mientras que Pike se declaró culpable de robo y de paso admitió otros crímenes similares. Se le dio sentencia de 4 años en prisión.