Han incrementado los gastos en insumos para el tratamiento de cadáveres, mientras que su riesgo ha crecido al cien por ciento.
Ante la pandemia generada por el COVID-19 en Coahuila, el grupo de profesionales de la salud, ha sido el principal grupo de alto riesgo, esto al tener contacto directo con quienes han dado positivo al contagio, no obstante, por otro lado se encuentran el personal forense, que a diario se enfrenta con la muerte de quienes se desconoce si son portadores o no, por lo que su riesgo ha incrementado al cien por ciento.
De acuerdo al médico forense Alejandro González Resendiz de 66 años de edad, coordinador de la región sureste de la Fiscalía General del Estado (FGE), ante la pandemia, se han tenido que cambiar los protocolos de manejo de cuerpos de las personas.
Alejandro tiene 27 años de experiencia y trabaja en el área de Servicios Periciales con cuatro compañeros que se dedican a lo mismo.
