Ni robots, ni humanos. El futuro de la minería en otros planetas podría pasar por la utilización de bacterias, pues son capaces de 'extraer' materiales en diferentes condiciones de gravedad. (ARCHIVO)
Ni robots, ni humanos. El futuro de la minería en otros planetas podría pasar por la utilización de bacterias, pues son capaces de "extraer" materiales en diferentes condiciones de gravedad, según revela un estudio publicado en "Nature".
La investigación, desarrollada por expertos de la Universidad de Edimburgo (Reino Unido), demuestra que el uso de ciertos microbios puede llevar a lo que denominan como "biominería", clave para si, en algún momento, los humanos colonizan otros mundos extraterrestres, como Marte.
Los científicos recuerdan que los elementos raros terrestres (REEs, sus siglas en inglés), son hoy en día componentes indispensables para la fabricación de dispositivos electrónicos, gracias a sus propiedades magnéticas y catalíticas.
No obstante, precisan que la extracción de REEs es costosa desde el punto de vista económico y técnico, al tiempo que su demanda sobrepasará pronto la oferta.
Por tanto, los expertos llevan años tratando de mejorar la biominería en la Tierra, donde se sabe que estas bacterias pueden extraer minerales en las condiciones reinantes, aunque desconocían, hasta ahora, si también podían hacerlo, por ejemplo, en un contexto de baja gravedad o cero.
Para comprobarlo, el equipo de la Universidad de Edimburgo, liderado por Charles Cockell, analizó el potencial de tres especies de bacterias (Sphingomonas desiccabilis, Bacillus subtilis y Cupriavidus metallidurans) en microgravedad.
También les pusieron a trabajar en una simulación de la gravedad de Marte en un experimento llevado a cabo a bordo de la Estación Espacial Internacional.
Así, midieron el grado de eficacia de los tres tipos de microbios en la extracción de una cantidad determinada de 14 REEs diferentes presentes en piedras de basalto, un entorno que es similar al que se puede encontrar en la superficie de Marte o la Luna.
Con otros experimentos paralelos desarrollados en la Tierra bajo una gravedad normal, observaron que la Sphingomonas desiccabilis era capaz de lixiviar o aislar REEs del basalto en esas condiciones y en las otras dos, microgravedad y cero.
Además de presentar una eficiencia para lixiviar similar en todos los niveles de gravedad, esa bacteria consigue extraer las mayores cantidades de los REEs más comunes en el basalto, el cerio y neodimio, hasta el 70 %.
Las otras especies bacterianas sufrieron reducciones en la eficiencia para lixiviar en microgravedad o demostraron que no tenían capacidad para aislar REEs en las tres condiciones de gravedad.
Estos resultados, resaltan los expertos, subrayan que, aunque las capacidades de la biominería microbiana dependen exclusivamente de estos organismos, "se pueden trasladar al espacio y en una gravedad similar a la de Marte".