El ambientalista indicó que los gobernantes no quieren tocar el problema del arsénico en el agua. (ARCHIVO)
De poco o casi nada va servir el proyecto Agua Saludable, si no va aparejado con la firme decisión por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), de evitar la sobreexplotación del acuífero principal, advirtió el ambientalista Gerardo Jiménez González.
En el conversatorio que tuvo con Julián Mejía Berdeja, presidente de Renacer Lagunero, Jiménez González destacó el gran problema en la salud que ha causado y sigue causando el arsenicismo en la Región Lagunera, conocido más a nivel nacional e internacional que a nivel local.
"Si la extracción actual de agua por medio de los miles de pozos agrícolas, legales e ilegales, continúa de la misma manera, el problema del hidroarsenicismo se acentuará y Agua Saludable no remediará el problema real y es por eso que la Conagua debe fortalecer su capacidad de trabajo", expuso el integrante de varias organizaciones ambientalistas.
Son varios los municipios con alta concentración de arsénico en el agua, asegura el también colaborador de El Siglo de Torreón, como Mapimí, Tlahualilo, Francisco I. Madero, Matamoros y Viesca, entre otros,"solo que el Sector Salud y los gobernantes no quieren tocar el tema, prefieren que se mantenga guardadito, pero en verdad, es preocupante el problema del hidroarsenicismo en La Laguna".
Otra situación existente, señala, es que es poca la gente que está informada sobre este tema y habrá que abrir espacios para que más personas se informen y preocupen, ya que afecta a todos.
Se calcula que alrededor de 200 mil habitantes del medio rural son los más vulnerables respecto al hidroarsenicismo, pues no tienen acceso al agua purificada de garrafón para consumir y toman de las redes de distribución o de los pozos agrícolas y es en el área rural donde hay más enfermedades asociadas con el arsénico, incluso de cáncer, asegura el ambientalista.
Enfatiza que el Sector Salud ha sido omiso, no ha atendido a los afectados y habría que elaborar un programa de vigilancia epidemiológica para atender a estas personas que están padeciendo diversas enfermedades derivadas del consumo de arsénico por medio del agua, pero como son de los poblados rurales, pues poco se sabe.
Respecto al proyecto del gobierno federal, refiere que si no se mejoran las redes de distribución del agua, el desperdicio de agua será el mismo que en la actualidad, de un 40 por ciento, aunado a que muy poca de esa agua será para beber, pues los mayores volúmenes se usan en las labores domésticas.
