En el 2003 en el Estadio Azteca, además de alzarse como monarca con México al vencer por la mínima diferencia a Brasil, fue catalogado como el mejor arquero de la competencia y recibió premio de Guantes de Oro. (JAM MEDIA)
El exarquero Oswaldo Sánchez, referente de Santos Laguna en la Liga MX y a nivel internacional, fue recordado por la Concacaf como un legendario elemento, que pudo consagrarse campeón de la Copa Oro en varias ocasiones.
Y es que el exguardameta de la Selección de México, fue parte de los equipos del Tricolor de 1996 y 2003 que ganaron el torneo. Los recuerdos de haber derrotado a Brasil 2-0 en la final de 1996 en Los Ángeles, California y nuevamente 1-0 a los amazónico en 2003 en el Estadio Azteca, todavía viven en la memoria del ahora analista de futbol de 46 años de edad.
"La Copa Oro de 1996 fue muy emocionante porque era muy joven y esas fueron mis primeras incursiones con la selección nacional. México jugó muy bien y para mí fue emocionante porque fue mi primer título como seleccionado, y fue mágico porque me abrió las puertas a la selección nacional", dijo Sánchez en una entrevista con el portal web de la Concacaf.
Por otro lado indicó que "2003 fue un torneo espectacular porque se jugó en México y también porque mi hijo nació durante ese tiempo. Pude ser campeón logrando derrotar a Brasil en la final y tuve la suerte de ser designado el Mejor Portero del torneo, así que estaba muy feliz porque consolidé mi estatus dentro de la Selección Nacional, además de ganar el premio Guante de Oro y el nacimiento de mi hijo", aseveró emocionado Sánchez.
Después de haber jugado partidos de la Copa Oro tanto en México como en los Estados Unidos, Sánchez señala la mayor diferencia entre jugar partidos en casa y en suelo estadounidense.
"La diferencia es que la gente de México está acostumbrada a verte jugar regularmente en las eliminatorias, lo que hace que los aficionados sean más exigentes. Cuando vas a los Estados Unidos, todos los seguidores de la Selección están muy contentos de ver a su equipo jugando, por lo que hay muchas festividades alrededor del juego. Es sorprendente y se debe a que esos mexicanos necesitan esa identidad de ver a su selección nacional mientras viven allá", dijo Sánchez.
EL MEJOR
El capitán de Santos Laguna del 2007 al 2014, no solo se aseguró el Guante de Oro en la Copa del 2003, sino que dos años después, obtuvo el mismo honor cuando la selección de México finalizó en cuarto lugar en la Copa Confederaciones en Alemania.
"Fue increíble, Dida de Brasil estaba allí, Oliver Kahn de Alemania, había muchos porteros que estaban de un gran nivel internacional y para mí fue muy satisfactorio recibir el premio al mejor guardameta. Sin duda fue mi mayor logro individual con la selección nacional de México. Ganar un premio en un torneo internacional tan prestigioso fue maravilloso", destacó.
VECES
levantó el título de campeón
en la Copa Oro de la Concacaf,
teniendo como rival a Brasil.
También fue durante la época en que Ricardo La Volpe, era el entrenador del equipo nacional mexicano. Es obvio ver la gran cantidad de respeto que Sánchez tiene por la perspicacia táctica del estratega argentino.
"En mis 25 años como jugador tuve muchos entrenadores, pero él (La Volpe) fue el mejor en poder interpretar a los jugadores lo que tenían que hacer en el campo. Todas las conversaciones con él son sobre futbol. Si te sientas con él a la mesa, tomaría las servilletas, saleros y pimenteros y hablaría sobre movimientos tácticos. Está obsesionado con el futbol y eso fue genial porque en esa época, nos dio una identidad futbolística muy fuerte. Es un entrenador que te enriquece, te da lecciones precisas sobre el futbol", indicó Sánchez Ibarra.
ANALISTA
A pesar de que sus días como jugador con la Selección Mexicana terminaron, Sánchez siguió de cerca al Tricolor, particularmente en la competencia de la Copa Oro y la victoria de México por 4-2 sobre los Estados Unidos en la final de 2011, sigue siendo una de sus favoritas.
"Fue mágico porque en el Rose Bowl en Pasadena hay un ambiente aún más especial cuando juega México. Creo que la valentía, la personalidad y la capacidad de reacción de México mostraron la verdadera personalidad del pueblo mexicano, un pueblo trabajador, que siempre aparece, que a veces está infravalorado, a veces ignorado, pero en ese juego fue el consolidación de un sueño importante porque refleja todos esos conceptos ", destacó el exmundialista en Francia 1998, Corea-Japón 2002 y Alemania 2006.
Sin embargo, Sánchez también señala la derrota de México por 2-1 ante Panamá en las semifinales de 2013, como una lección importante en cuanto a las virtudes de una mayor competencia en la región.
"Creo que el futbol en la Copa Oro da oportunidades a otros países para desarrollarse y mejorar. Creo que eso es lo mejor de la competencia en el futbol, que en cualquier momento cualquiera puede vencer a cualquiera y me alegra que Panamá se dé cuenta de que puede competir. Después de esa victoria, ganaron mucha confianza y terminaron clasificándose para Rusia 2018. El futbol de Panamá había evolucionado y ese fue el bastión para dar ese paso adelante".
Sánchez también destacó la final de la Copa Oro 2015, en la que México venció 3-1 a Jamaica. Quizás lo más importante, el torneo sirvió como el paso de la antorcha de liderazgo dentro de la Selección Mexicana del defensor Rafael Márquez al mediocampista Andrés Guardado.
"Creo que fue la consolidación de que Andrés fuera el líder de la selección nacional con la salida de Rafa Márquez. Ahora Andrés es capitán, es un jugador de gran jerarquía que ha estado con la selección nacional desde el 2006 cuando La Volpe lo llevó a la Copa del Mundo cuando tenía 18 años. Ha crecido mucho y continúa jugando a un alto nivel con su club, el Betis, en España, por lo que la final fue la consolidación de Guardado como capitán de México", concluyó Sánchez.
