La conservación efectiva de su éxodo está a cargo del monitoreo de Estados Unidos, Canadá y México, comisionados de declarar las áreas de la ruta como protegidas. (ESPECIAL)
La ruta de la mariposa monarca por Norteamérica se encuentra en peligro de extinción a causa de la utilización excesiva de herbicidas, por lo que investigadores de la UNAM trabajan en modelos que ayuden a la preservación de estas zonas.
La problemática, que crece también por la alteración del uso de suelo, el cambio climático y la reducción en la disponibilidad de néctar y polen, es atendida por la exploración dirigida por Víctor Sánchez-Cordero, experto del Instituto de Biología (IB) de la UNAM cuyo sistema permite la localización de las mariposas durante su proceso migratorio.
El modelo consiste en una serie de mapas que indican en qué parte de la ruta se encuentran las mariposas en Norteamérica durante determinados meses para establecer una plataforma geográfica de información para conservar el fenómeno migratorio, informó la UNAM través de un comunicado.
Este trabajo se complementa con otro estudio que aborda las actividades que se deben emplear en tierras mexicanas basado en las interacciones bióticas de la mariposa con especies de plantas de las que se alimenta y especies de árboles donde perchan.
La conservación efectiva de su éxodo está a cargo del monitoreo de Estados Unidos, Canadá y México, comisionados de declarar las áreas de la ruta como protegidas y contar con interconectividad suficiente, afectadas por el daño del algodoncillo (Asclepia) del que se alimentan las mariposas, y donde depositan sus huevecillos, y el cambio climático y la deforestación.
La migración de la mariposa monarca es uno de los fenómenos más espectaculares de la naturaleza. Con un peso que oscila entre 0.25 y 0.75 gramos, recorre cerca de cuatro mil 500 kilómetros entre México, Estados Unidos y Canadá.
Sánchez-Cordero cree imprescindible reparar en los nuevos paradigmas para la conservación de estas rutas y el desarrollo de una red de áreas de conservación que incluyan zonas protegidas, sitios prioritarios de preservación y agrosistemas interconectados.
