La empresa despidió a Weinstein en octubre de 2017, días después de que el New York Times publicó una historia detallando décadas de acoso sexual de Weinstein contra actrices y empleadas que lo acusaban. Weinstein presentó una solicitud de arbitraje dos semanas después, afirmando que hubo violaciones a su acuerdo laboral y reclamos relacionados con leyes estatales. (ARCHIVO)
El exmagnate de Hollywood declarado culpable de violación Harvey Weinstein pidió a un juez de bancarrotas en Delaware que le permita buscar arbitraje en Nueva York por lo que afirma fue su despido injustificado de la empresa que cofundó.
La abogada de Weinstein presentó un documento ante la corte esta semana pidiendo al juez a cargo de supervisar la quiebra de The Weinstein Co. que retire la orden que impide procesos exteriores que involucran a los deudores para que Weinstein pueda llevar el caso de arbitraje que presentó en 2017.
“Información recientemente descubierta y hechos, averiguados durante el curso de la investigación y el descubrimiento de asuntos colaterales, han mostrado evidencias que corroboran la acusación por terminación injustificada que es sujeta a arbitraje”, escribió la abogada de Weinstein, Julia Klein.
The Weinstein Co. se declaró en bancarrota en marzo de 2018 en medio del escándalo por abuso sexual que terminó con el poder de Weinstein en la industria y desató un movimiento nacional contra el comportamiento sexual depredador y el acoso en el trabajo. Weinstein fue sentenciado a 23 años en prisión este año tras ser declarado culpable en Nueva York de violación y abuso sexual.
Los fiscales en Los Angeles piden su extradición a California para enfrentar cargos por violar a una mujer y abusar sexualmente de otra en 2013.
De acuerdo con los documentos presentados el miércoles en la corte, en 2015 Weinstein entró en un acuerdo laboral con The Weinstein Co. que incluye una provisión que requiere arbitraje en Nueva York por cualquier disputa entre ambas partes, incluyendo acusaciones de discriminación y por violación a cualquier ley federal, estatal o local.
La empresa despidió a Weinstein en octubre de 2017, días después de que el New York Times publicó una historia detallando décadas de acoso sexual de Weinstein contra actrices y empleadas que lo acusaban. Weinstein presentó una solicitud de arbitraje dos semanas después, afirmando que hubo violaciones a su acuerdo laboral y reclamos relacionados con leyes estatales.
El futuro del caso por bancarrota está en el aire tras la decisión de un juez federal en Nueva York el mes pasado para rechazar un acuerdo de 19 millones de dólares entre Weinstein y algunos de sus acusadores. Los abogados de otras supuestas víctimas se habían opuesto al acuerdo que también habría requerido la aprobación de una corte de bancarrotas.
La cantidad sugerida del acuerdo fue incluida en un plan propuesto en el caso de bancarrota para crear un fondo de 46,8 millones de dólares para llegar a acuerdos legales contra Weinstein y otros miembros de la empresa y para cubrir los costos de su defensa en la corte.
Los abogados de dos mujeres que presentaron demandas afirmando que fueron abusadas sexualmente por Weinstein pidieron al juez de bancarrotas que cambie el caso de quiebra a un caso de liquidación. Al hacerlo reducirían la cantidad de dinero destinada a los profesionales y permitirían que un fideicomisario llevara las demandas civiles a nombre de la entidad de bancarrota contra Weinstein y otros miembros de la empresa, según afirman.
Los abogados de la empresa y el comité oficial de acreedores no asegurados han pedido al juez que les de hasta el 31 de agosto para tratar de negociar un plan revisado que eliminaría la acción de clase para las acusaciones por una conducta sexual inapropiada y sería supervisado únicamente por la corte de bancarrotas sin que se involucrara la corte de distrito de Nueva York.
Los abogados de ambas mujeres afirman que cualquier plan modificado de bancarrota será dictado y financiado por compañías aseguradoras codiciosas que no son fideicomisarias de la entidad de bancarrota y no trabajan para proteger los intereses de las víctimas de Weinstein.
El caso tiene programada una audiencia el 2 de septiembre.
