Si bien en los días de la pandemia de COVID-19 el interés de los mexicanos por saber más sobre testamentos y conocer detalles de herencias se ha incrementado, aún el número de personas que deja por escrito su voluntad sobre la propiedad de sus bienes es baja, reconoció el Colegio Nacional del Notariado Mexicano. (EL UNIVERSAL)
Si bien en los días de la pandemia de COVID-19 el interés de los mexicanos por saber más sobre testamentos y conocer detalles de herencias se ha incrementado, aún el número de personas que deja por escrito su voluntad sobre la propiedad de sus bienes es baja, reconoció el Colegio Nacional del Notariado Mexicano.
"Con la pandemia definitivamente más personas acuden ante el notariado a asesorarse o a seguir los trámites de la herencia. Tengamos en cuenta que también los juzgados estuvieron casi un año cerrados, entonces muchas personas se acercaban con nosotros. "El trámite de la herencia se puede seguir ante notario, en el caso de que haya testamento y de que todos los beneficiarios sean mayores de edad o incluso a falta de testamento, si todos los herederos son mayores de edad y están de acuerdo con en el proceso a seguir dentro de la herencia. Pero sí, se ha incrementado", explicó el presidente del organismo, Guillermo Escamilla.
Explicó que menos de 5% de los mexicanos en edad para contar con un testamento han realizado este trámite. Con base en esa realidad, y ante las condiciones provocadas por la pandemia, durante septiembre, mes del testamento en México, se intensificará la campaña para que un mayor número de mexicanos tenga este respaldo legal.
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Desde el 2003, septiembre es considerado como el mes del testamentoEl representante de los notarios del país comentó que ante la muerte de un familiar y que haya tenido deudas por pagar, estas no se heredan a sus familiares, aunque en algunos casos en que se hayan otorgado bienes a través de un testamento, se podrá echar mano de algunos de ellos para cobrar una deuda pendiente, sin que esto signifique que los herederos deberán tomar de sus propios recursos para liquidar los pendientes financieros de su familiar fallecido.
"Vamos a pensar que me prestó 20 mil pesos. Fallecí y usted dice, ¿ahora quién me va a pagar? Va y le toca la puerta a mi esposa que es mi albacea y le dice, oiga señora, fíjese que Guillermo me debe dinero y necesito que me pague. Mi esposa dirá déjeme verificar qué otra deudas tenemos y con qué bienes le vamos a pagar y al final del día si yo dejé bienes para pagarle el dinero se va a pagar, pero si no dejé, no habrá bien sobre el cual cobrar. Mi esposa y mis hijos no serán responsables del pago de esa deuda", ejemplificó.
Si bien la recomendación para todos los mexicanos de elaborar su testamento y evitar problemas a sus familiares es permanente, Escamilla recordó que en septiembre el procedimiento tiene descuentos de hasta 50% y su importancia en la vida familiar se mide en el momento de repartir bienes, ya que cuando hay un respaldo legal es cuestión de semanas, mientras que si los bienes quedan intestados, pueden transcurrir años.
"El problema es cuando no hay una coincidencia entre las personas que se sienten con derecho a heredar y entonces inician un procedimiento judicial en el cual además se van desahogando aquellos problemas previos al fallecimiento de la persona y que se van a agravando por la discordia que hay ante la falta de un testamento.