Sembrando Vida paga actualmente a cerca de 420 mil agricultores una suma de 4 mil pesos al mes.
Campesinos de Yucatán y Campeche deforestan zonas de selva para acceder a los apoyos del programa Sembrando Vida, que impulsa el Gobierno federal, revela un reportaje de Bloomberg.
En una visita a finales de febrero, el medio documentó que en las colinas de la península de Yucatán, la jungla se detiene abruptamente y decenas de árboles jóvenes crecen esparcidos alrededor de troncos de árboles carbonizados.
Las plántulas responden al programa de reforestación del Gobierno, pero también a las áreas quemadas. En esta parte de México, el proyecto está relacionado simultáneamente con la destrucción generalizada y la regeneración.
"Esto es lo que hace Sembrando Vida", dijo José, un campesino local, pateando un tronco negro. Pidió a Bloomberg no revelar su apellido por temor a perder los fondos por criticar el programa.
Los pobladores aseguran que el programa incentiva a arrasar con zonas de selva para prepararlas a la siembra. La incertidumbre también abunda sobre el estado legal de las parcelas replantadas, lo que significa que no hay garantía de que los agricultores puedan cosecharlas, por lo que para algunos hay poca motivación para cuidar de estas nuevas siembras.
"En muchos lugares la gente se fue a decir: 'Bueno, yo tenía mi hectárea de selva, pero viene el programa, pues tiro la selva, los árboles me sirven para mi casa o para vender la madera o para lo que sea, y cuando venga el nuevo programa vuelvo a sembrar'", indicó Sergio López Mendoza, profesor de ecología y conservación de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas.
Sembrando Vida paga actualmente a cerca de 420 mil agricultores una suma de 4 mil pesos al mes por plantar árboles, según el Gobierno federal. El objetivo es reforestar un poco más de un millón de hectáreas de terrenos deteriorados en todo México y cultivar más de mil millones de plantas para finales de 2021. El Gobierno dice que está en camino de cumplir dicho objetivo.
Sin embargo, ese éxito puede haber tenido su costo, según el Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés), una organización ambiental sin fines de lucro que ha trabajado con el Gobierno mexicano para monitorear los resultados de Sembrando Vida.
El WRI, con sede en Washington, estima que el programa pudo haber causado la pérdida de casi 73 mil hectáreas de cobertura forestal en 2019, su primer año completo, de acuerdo con un estudio basado en imágenes satelitales que fue compartido con Bloomberg.
Esto sería un área casi del tamaño de la ciudad de Nueva York. También es casi la mitad de la cantidad anual promedio de cobertura forestal que se pierde debido a cambios en el uso de la tierra y la tala ilegal en la misma región, según cálculos del WRI.
No obstante, algunos piensan que la devastación podría ser aún peor. Juan Manuel Herrera, un ingeniero forestal de Campeche, aseguró que el estado habría tenido potencialmente pérdidas mucho más altas que aquellas estimadas por el WRI.
Según un participante del programa, en una sola aldea de Campeche, más de dos tercios de los participantes del programa habían talado el bosque para poder obtener el beneficio.
Antonio, quien pidió ser identificado solo por su nombre por temor a las repercusiones, mostró dónde él y sus familiares habían despejado una densa zona de árboles que incluía tzalam, o nogal caribeño, y chacá roja, comúnmente conocida como gumbo-limbo, para tener derecho a los pagos.
Un representante de Sembrando Vida en la aldea negó que las personas hubieran talado árboles para ingresar al programa en el área; aseveró que habían usado tierras de pastoreo de ganado.
Antonio, por su parte, comentó que no habían tocado el terreno de pastoreo porque su ganado lo necesitaba. Quería mantener la selva intacta y talar algunos árboles pequeños para ayudar a los demás a crecer, pero los representantes del programa sólo buscaban terrenos despejados, y él necesitaba el dinero del Gobierno.
La Oficina de la Presidencia declinó hacer comentarios sobre esta nota de Bloomberg. La Secretaría de Bienestar, a cargo de Sembrando Vida, no entregó respuesta a preguntas detalladas sobre el programa.