El Banco de México confirmó este lunes que recibió los 12,117 millones de dólares del mecanismo DEG del Fondo Monetario Internacional (FMI) y advirtió al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, que estos recursos solo se pueden usar para dar 'estabilidad' al peso. (ARCHIVO)
El Banco de México confirmó este lunes que recibió los 12,117 millones de dólares del mecanismo DEG del Fondo Monetario Internacional (FMI) y advirtió al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, que estos recursos solo se pueden usar para dar "estabilidad" al peso.
"Su uso está determinado por la Ley del Banco de México, en la que se establece que dicha reserva tendrá como único objeto coadyuvar a la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional mediante la compensación de desequilibrios entre los ingresos y egresos de divisas del país", detalló en un comunicado.
En marzo pasado, el FMI resolvió realizar una nueva asignación de derechos especiales de giro (DEG) para reforzar la liquidez durante la pandemia de COVID-19 por valor de 650,000 millones de dólares, los cuales se reparten proporcionalmente entre los países miembros.
El presidente López Obrador dijo el 11 de agosto que quería usar la asignación correspondiente a México para "pagar deuda" del Estado y frenar el endeudamiento del país, uno de sus principales objetivos económicos.
El banco central informó este lunes que el FMI ya "hizo efectiva la asignación" que en México equivale aproximadamente a 12,117 millones de dólares, una operación que "incrementa en idéntica cantidad tanto el pasivo como el activo del Banco de México".
"El objeto de esta asignación es proveer de liquidez adicional al sistema económico mundial mediante el fortalecimiento de las reservas internacionales de los países miembros del FMI", detalló el banco central.
Explicó que mediante este mecanismo, el Gobierno federal puede comprar "a precios de mercado" al Banco de México "moneda extranjera para cumplir con sus obligaciones en divisas".
López Obrador aseguró que este dinero va directo a las reservas del Banco de México, pero dijo que su Gobierno podría "usar estos recursos" porque las reservas del banco central ya "han crecido mucho".
No es la primera vez que el presidente quiere meter mano en las reservas del Banco de México, puesto que en mayo criticó al banco por no entregar remanentes al Gobierno y exigió que explique qué hace con sus 190,000 millones de dólares en reservas.
En junio, López Obrador anunció que postulará al frente del Banco de México al que entonces era su secretario de Hacienda, Arturo Herrera.
México cerró 2019, el primer año del Gobierno de López Obrador, con una deuda del 44.5 % del producto interior bruto (PIB), mientras que en 2020 fue del 52.3 %, algo que el presidente atribuye a la caída del PIB por la pandemia de COVID-19 y no a nuevo endeudamiento.
La economía mexicana cayó el año pasado un 8.2 %, la peor crisis desde la Gran Depresión, y se espera que repunte más de un 6 % este 2021.