Bayern Múnich y PSG se miden en Alemania, en el partido de ida de los cuartos de final; en agosto de 2020 chocaron en la final de la Champions. (EFE)
Bayern Múnich y París Saint Germain escribirán hoy el primer capítulo de la reedición de la última final de la Liga de Campeones, esta vez en el peldaño de los cuartos de final, un duelo marcado por las bajas del goleador Robert Lewandowski, la gran referencia ofensiva del conjunto de Hans-Dieter Flick, y de Marco Verratti, clave en la medular del bloque de Mauricio Pochettino.
La lesión en los ligamentos de la rodilla derecha en el partido de su selección contra Andorra deja al defensor del título huérfano de su '9', del estilete de un equipo que ha mantenido el rodillo de la pasada temporada al que reta, una vez más, el PSG, ávido de resarcirse de la derrota sufrida en el estadio lisboeta La Luz con el tanto de Kingsley Coman.
En la Bundesliga, el Bayern dio el sábado un gran paso hacia el noveno título consecutivo al derrotar al Leipzig 1-0, sin Lewandowski, y lograr una ventaja de siete de puntos sobre su perseguidor.
El partido contra el RB Leipzig no fue fácil y el Bayern llegó a estar en algunos momentos contra la pared, lo cual puede ser un mal presagio.
El París Saint-Germain viaja a Múnich en uno de sus momentos más duros de la temporada, lleno de dudas tras la derrota liguera contra el Lille y con la falta de confianza que le provocó el partido de vuelta contra el Barcelona en octavos de final de la Liga de Campeones.
El duelo contra el Bayern aparece en su horizonte como una auténtico examen de su potencial, el que deberá determinar si el PSG ha dado el salto adelante que esperan sus propietarios o si su constelación de estrellas debe todavía esperar para asaltar los cielos.
En París esperan todavía que la conexión Neymar-Mbappé dé esta temporada todo el fruto que se presume a los dos jugadores más caros de la historia y enfrentarse a los actuales campeones parece una buena oportunidad para sacar sus mejores galas.
Sobre todo, porque el equipo afronta el compromiso con algunas bajas importantes, como Marco Verratti, positivo por coronavirus.