Creadores. Tres equipos de cineastas coahuilenses se dieron cita ayer en el auditorio del Museo Arocena de Torreón.
La tarde de ayer, cineastas coahuilenses se dieron cita en Torreón para el estreno de los cortometrajes ganadores de la convocatoria Proyectos cinematográficos en corto, realizada por la Secretaría de Cultura de Coahuila y los Estudios Churubusco.
En la categoría Creador con trayectoria, se seleccionaron los proyectos de El canto de las cigarras, de Óscar Moreno Terrazas Troyo (Saltillo) y Mar de Odelba Yazmín Salazar Arreola (Francisco I. Madero). Mientras que en la categoría Talento emergente, el cortometraje ganador fue El mezquital, de Martha Alicia Gándara Díaz (San Pedro de las Colonias).
Cabe destacar que estas obras recibieron financiamiento para su realización: 120 mil pesos para cada uno de los dos seleccionados en Creador por trayectoria, mientras que 80 mil más fueron para el filme seleccionado en Talento emergente.
Las obras fueron rodadas durante la pandemia, bajo las respectivas restricciones sanitarias.
SOBRE LOS FILMES
Creadores de los tres cortometrajes conversaron con El Siglo de Torreón sobre la temática de sus obras, así como la experiencia que les arrojó el rodaje de las mismas.
En primera instancia, Óscar Moreno, director de El canto de las cigarras, comentó que su obra es una historia sobre la relación entre un padre y su hijo, pero que también es una historia ceguera, ya que relata el conflicto generado por el retorno del hijo, después de que su padre lo creyó muerto. Sin embargo, el hijo ha cambiado y se ha entregado a las redes del hampa, siendo uno de sus pistoleros.
Ambientado en la soledad del desierto, filmada en Campo Marte, donde el sonido de las cigarras suele interrumpir el silencio, el filme de Moreno es también una historia de fantasmas, de voces silenciadas que después encuentran eco en la conciencia de un arrepentido.
Ante el nuevo oficio de su hijo, el padre busca al niño que perdió. Es un conflicto interno que desemboca en la desesperación de quien teme a su creación y desea eliminarla por el peligro que representa.
Este conflicto interno también se entrelaza con el conflicto social de las desapariciones de personas en el estado.
Por su parte, El mezquital, dirigido por Joss García y producido por Martha Gándara, transcurre en un tenor similar.
La tierra desértica se manifiesta desde el inicio, en la búsqueda de lo vital. Su narrativa radica en la esperanza, pues la historia emerge de un páramo afectado por la inseguridad, la sequía y el abandono.
Es el lugar donde habita el protagonista, un campesino que tiene la convicción de que lloverá en su terruño llamado El mezquital, donde también se acompaña de un chivero. De pronto, la incursión de la delincuencia rompe con la rutina del lugar y los campesinos deberán tomar una decisión que cambiará sus vidas.
Este cortometraje fue grabado en el Ejido Vizcaya, municipio de Matamoros, Coahuila. Según la productora Martha Gándara, se eligieron esas locaciones por la riqueza natural de los escenarios.
Finalmente, Odelba Salazar, productora del filme de animación Mar, comentó que este tiene una temática ambientalista que principalmente se dirige al público infantil.
La idea del proyecto, que también fue realizado por laguneros, pretende crear conciencia sobre la contaminación y el cuidado de los mares.
En su animación se experimentó una técnica de acuarela en 2D. Formato híbrido que enriqueció su estética y la hizo más apreciable a ojos del espectador.
La producción del cortometraje Mar se hizo a distancia entre los integrantes.
Se informó que estos cortometrajes coahuilenses también serán presentados en Monclova y Saltillo.