No existe una cura para la epilepsia canina, solo tratamientos para calmar los síntomas. (ESPECIAL)
Cuando se trata de nuestras mascotas lo más importante es su salud.
La epilepsia en los perros es el problema neurológico más común, entre el 0.5% al 5.7 % de las consultas se diagnostica, de acuerdo al libro Fundamentos de la neurología clínica veterinaria de R. Bagley.
Cuando un cachorro tiene epilepsia es muy importante que entre en tratamiento, aunque este sea un proceso lento es necesario la reevaluación constante.
Estos ataques se producen cuando su actividad eléctrica se vuelve anormal y le provoca convulsiones, sus neuronas se hiperactivan y provocan la sobre excitación.
Existen diferentes síntomas que debemos tener en cuenta para tratar de detectar si nuestra mascota presenta esos ataques.
Las contracciones musculares, los vómitos, que tu perro defeque sobre el mismo, no responde a estímulos o tiene salivación excesiva.
Los síntomas pueden durar alrededor de diez minutos, tu perro se puede asustar pero debes mantener la calma y llamar inmediatamente a tu veterinario. Lo aconsejable es revisarlo y realizar diferentes estudios para descartar o comprobarlo.
Desafortunadamente no existe una cura para la epilepsia canina, solo tratamientos para calmar los síntomas y reducir su frecuencia.
Darle la atención y el amor que el perro necesita no lo hará menos capaz de controlarse, al contrario sentirá seguridad y su miedo se controlará.