Paris Saint-Germain buscará sacar ventaja en casa para tratar de llegar a su segunda final de Liga de Campeones. (CORTESÍA PSG)
París Saint-Germain y Manchester City, los dos equipos que más gastan del mundo, las dos plantillas más caras, formadas a golpe de petrodólares con firma del Golfo Pérsico, abren hoy en el Parque de los Príncipes el duelo de semifinales de la Liga de Campeones.
Ha costado varios años e incalculables inversiones ver afrontarse a dos equipos que comparten un mismo modelo y que persiguen una misma ambición, la de promocionar a sus respectivos emiratos, Catar en el caso de los parisienses, Abu Dabi en el de los ingleses, lo que atisba también cierta tensión diplomática.
Duelo también de personalidades en el banquillo, entre Mauricio Pochettino que se hizo con las riendas del PSG en enero pasado y Pep Guardiola, que a la quinta intentona al frente del City ha vuelto a las semifinales de la Liga de Campeones por octava ocasión en su carrera.
Todos los ingredientes están reunidos para vivir un choque de los grandes, el que promete la rivalidad entre los Neymar, Mbappé o Di María, frente a los De Bruyne, Mahrez o Foden.
Los franceses persiguen su segunda final consecutiva en la máxima competición europea, con la confianza de haber derrotado en las dos fases previas a dos gigantes como el Barcelona y el Bayern de Múnich, defensor del título.
Pochettino tiene, además, a todas sus estrellas a disposición, con un Neymar y un Mbappé en el mejor momento de la temporada, justo cuando empiezan a repartirse las copas.
Su trayectoria es ascendente, aunque el título liguero doméstico está en entredicho por la resistencia de un Lille que, de momento, les relega a la segunda posición.
Pero Europa ha sido siempre la obsesión de Doha y también de un Neymar que dejó Barcelona para conquistar la "orejona" en las orillas del Sena.
Por su parte Guardiola tiene a todos disponibles, incluso a un Kevin de Bruyne que dio el susto hace unos días al lesionarse el tobillo.
El City ya ha sobrevivido al susto del Borussia Dortmund, que les tuvo durante 40 minutos eliminados, y ahora se mide a las estrellas del PSG en su mejor temporada defensiva.
Su mayor punto negro durante los últimos años, la línea de atrás, al fin es fiable.
Arriba se abren las mil alternativas para el técnico español. Puede jugar con un 'nueve' como Gabriel Jesús. Puede tirar al brasileño a la banda y jugar arriba con Raheem Sterling, puede usar de falso 'nueve' a Phil Foden, incluso a De Bruyne. También podría dar minutos a Sergio Agüero, pero esa es la opción más improbable.
