Hasta antes de la pandemia, cada año las empresas dedicadas a este giro presentaban crecimiento económico al cierre de cada ciclo fiscal, lo que no ocurrió durante 2020 ni pasará este 2021.
La recesión económica, la inflación y el aumento del dólar no permitieron que este año la industria restaurantera de comidas rápidas de franquicias internacionales creciera, indicó el empresario de este ramo, Theodoros Kalionchiz de la Fuente.
El entrevistado indicó que hasta antes de la pandemia, cada año las empresas dedicadas a este giro presentaban crecimiento económico al cierre de cada ciclo fiscal, lo que no ocurrió durante 2020 ni pasará este 2021.
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Autoridades municipales acudieron a su reinauguraciónAclaró que hasta el cierre de noviembre los indicadores económicos presentaron en el sector restaurantero de franquicias un desarrollo positivo.
Esto representa una recuperación a la contracción que se dio por la caída en las ventas durante el resguardo sanitario masivo por la pandemia, afirmó.
Señaló que el repunte que presenta esta industria no logrará crecimiento, pero afortunadamente no será de pérdidas.
Kalionchiz es propietario de ocho restaurantes de franquicia internacional en el estado, y dijo que las inversiones que tiene en Torreón, Piedras Negras y Acuña muestran un mayor crecimiento que las de Monclova, que tienen un movimiento económico mucho más lento.
Explicó que en La Laguna hay inversiones y nuevas fuentes de empleo, por lo que el impacto de la crisis es menor; en Piedras Negras y Acuña hay mayor diversificación económica, e incluso nuevas industrias y mayor movimiento de visitantes y de contratación en habitantes locales, lo que permite un mayor flujo de efectivo en el comercio de ambas poblaciones.
Monclova y la Región Centro, señaló el empresario, es donde menos crecimiento hay, y pronosticó que este diciembre no alcanzará el mismo nivel de ventas de 2019 por la recesión.
Explicó que la inflación que está por arriba del siete por ciento, el aumento en el precio del dólar, la recesión por la falta de liquidez de las empresas por los pasivos de AHMSA con ellos y el desempleo, generará un impacto negativo en la economía local, que tendrá menos ventas que en años anteriores.
Explicó que el sector trabajador se mostrará muy cuidadoso en sus gastos de diciembre porque no se sabe cómo empezará el 2022.
No se sabe si todas las empresas seguirán soportando la recesión o si habrá más cierres y despidos de trabajadores.
2019 fue el último año de crecimiento económico para los restaurantes de franquicias, afirmó Theodoros Kalionchiz de la Fuente.
Hasta ese año, dijo, las franquicias presentaban cada año un aumento de 10 por ciento en utilidades. 2020 tuvo las mismas utilidades que el año anterior, no hubo crecimiento. Ahora el 2021 muestra la misma tendencia, sostuvo.
