Sarkozy, quien ejerció la presidencia entre 2007 y 2012, podría ser sentenciado a un año de cárcel.
Comenzó el juicio al expresidente francés Nicolas Sarkozy por acusaciones de que su intento reeleccionista de 2012 fue financiado con fondos ilegales.
El exmandatario, de 66 años, enfrenta acusaciones de haber gastado casi el doble de los 22,5 millones de euros (27.5 millones de dólares) permitidos para una campaña electoral.
Sarkozy, quien fue derrotado en esas elecciones por el socialista Francois Hollande, niega haber cometido ilegalidad alguna. No acudió a la audiencia del jueves en los tribunales sino que fue representado por sus abogados. Se prevé que el juicio dure hasta el 22 de junio.
Sarkozy, quien ejerció la presidencia entre 2007 y 2012, podría ser sentenciado a un año de cárcel y a pagar una multa de 3,750 euros (4,580 dólares) de ser hallado culpable.
El juicio comienza menos de tres meses después de que Sarkozy fue hallado culpable en otro proceso, por corrupción y tráfico de influencias. Sus abogados ya apelaron ese fallo.
A consecuencia de varios escándalos, desde 1990 las leyes francesas limitan estrictamente el dinero que se puede gastar en campañas políticas.
Según las investigaciones, Sarkozy "indisputablemente se benefició de fraudes que le permitieron, durante su campaña del 2012, tener recursos mucho mayores a lo que las leyes permiten".
Un juez investigador determinó que Sarkozy y su entorno realizaron "mítines de campaña espectaculares y costosos" y que los gastos totales de la campaña ascendieron a por lo menos 42.8 millones de euros (52 millones de dólares).
Cabe recalcar que la defensa de Nicolas Sarkozy reclamó este jueves, en la primera jornada del juicio contra el expresidente francés por financiación ilegal de su campaña electoral de 2012, la anulación de la acusación por estar plagada de irregularidades y porque ya fue juzgado y sancionado por esa cuestión.