Es la repetición de la imposición violenta a las exigencias del respeto a sus derechos obreros, señaló. (SERGIO A. RODRÍGUEZ)
La violenta represión contra trabajadores sindicalizados en la planta de Dos Bocas en Tabasco, es la repetición de la imposición violenta a las exigencias del respeto a sus derechos obreros, señaló el líder nacional del Sindicato Minero Democrático, Ismael Leija Escalante.
El representante de la central obrera manifestó que el gobierno, en lugar de ser garante de los derechos de los trabajadores y validar la reforma laboral que consolida su libertad a adherirse al sindicato de su preferencia, aplastó un movimiento que exigía el respeto a sus derechos.
“Los trabajadores tienen la libertad y el derecho a manifestarse y a elegir al organismo sindical que quieren que los represente, y el gobierno no tiene derecho a reprimir las manifestaciones ni a disparar a quienes reclaman por sus derechos”, dijo.
La represión a los trabajadores de Boca del Río costó la vida a un obrero, muerto por un disparo realizado por fuerzas armadas del gobierno.
“Es algo inconcebible lo que está sucediendo, por intereses de unos cuantos se pone en riesgo la integridad física y la vida de miles de trabajadores“ sostuvo Leija.
“Por ahí leía y yo que el presidente de la República dijo que es una pugna entre sindicatos; Pues se supone que la reforma laboral ya está. Están sencillo de ponerlo en la mesa, que lo lleven a las urnas y que los trabajadores se queden con el sindicato de su preferencia” indicó.
Exigió al gobierno que aplique lo que tanto promueve en la defensa de los derechos de los trabajadores y de la reforma a la ley Federal del Trabajo.
Comparó las acciones del gobierno con lo ocurrido en 1906 en Cananea Sonora, y dijo que se repite la historia porque es lo mismo que estaban peleando los trabajadores en Dos Bocas de Ica Flour: “estaban pidiendo sus derechos” y fueron reprimidos de manera violenta.
Tras un enfrentamiento con antimotines de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSCP) del Estado, frente a la refinería Dos Bocas, en Tabasco, un trabajador de la empresa ICA Fluor murió por un disparo de arma de fuego, acusaron manifestantes.
Uno de los obreros de la empresa, inconforme con los salarios y horas de trabajo en la construcción de la refinería de Puerto Ceiba, en el Municipio de Paraíso, aseguró que su compañero murió por un disparo que recibió en la espalda. El trabajador falleció camino al hospital, abordo de una ambulancia.
En la reyerta las fuerzas armadas dispararon armas de fuego con proyectiles supuestamente de goma, balas “normales” y granadas de gases lacrimógenos.
