'Por donde quiera que veas, Matamoros está destrozado', dice el regidor independiente, Gonzalo Barrios, quien indicó que el presidente Horacio Piña no hizo nada por su municipio. (EL SIGLO DE TORREÓN)
En muy malas condiciones va a recibir la próxima Administración municipal de Matamoros esta ciudad y el municipio en general, señalan habitantes, quienes aseguran que "basta caminar por las calles de la zona urbana para darse cuenta del pésimo estado del pavimento, que es lo más evidente durante el día, porque en la noche la falta de alumbrado público también es fácil de percatarse". Vecinos del área habitacional conocida como "Las Vegas de Marrufo", se quejan de los olores nauseabundos provocados por las aguas negras que salen de la alcantarilla ubicada en el crucero de la avenida Zuazua y calle Libertad, ya que el drenaje se colapsó y de manera constante sale el agua que corre y se estanca.
Una vecina manifestó que ese problema ya tiene mucho tiempo y han acudido a las oficinas del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), pero no ha servido de nada y adelantó la probabilidad de juntar esa agua en botes para irlas a arrojar a las oficinas de la Presidencia Municipal o del propio Simas, para que puedan atender la problemática.
A lo largo de la calzada Cristóbal Díaz, al extremo oriente de la ciudad y que se convierte en la carretera a Filipinas, hacia el sur, el pavimento se encuentra en lamentables condiciones e incluso por la Cuauhtémoc, en el área de Las Meloneras.
"Por donde quiera que veas, Matamoros está destrozado", dice el regidor independiente, Gonzalo Barrios, quien indicó que el presidente Horacio Piña no hizo nada por su municipio "y nunca se preocupó por hacer una obra importante, ya que sus ocupaciones han sido otras y el que hizo y deshizo fue su primo Beto Piña".
Refiere que los caminos vecinales que confluyen en esta ciudad, se encuentran en similares condiciones "y el alcalde ni siquiera hizo gestiones para arreglar esos caminos que, en algunos tramos ya es terracería al acabarse el pavimento", como el camino a Flor de Mayo, entre otros.
Recordó que recursos hubo, pero "nadie sabe a dónde fueron a parar" y puso como ejemplo los ingresos por concepto de expedición de guías del melón y sandía, que calcula en unos 7 millones de pesos sólo de este año, pero no supieron dónde quedaron.
