Los negocios del norte de México son los beneficiados por el cierre de fronteras con Estados Unidos, al registrar un aumento de sus ventas de 40%, dijo el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco), José Manuel López Campos. (ARCHIVO)
Los negocios del norte de México son los beneficiados por el cierre de fronteras con Estados Unidos, al registrar un aumento de sus ventas de 40%, dijo el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco), José Manuel López Campos.
El líder del comercio organizado expuso que el ingreso para los negocios de comercio, servicios y turismo representó 170 mil millones de pesos, desde marzo de 2020, que inició la pandemia a la fecha.
De esa cantidad, 45 mil millones de pesos correspondieron únicamente a las ventas del comercio; los otros 125 mil millones de pesos son por ventas del sector servicios y turismo, en la franja fronteriza de México en todos los casos.
Ello gracias a que las compras de ropa, calzado, gasolina y alimentos que antes se hacían en Estados Unidos, ahora se realizan en los estados de Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas.
Tan sólo "en Matamoros se tiene un registro de 115 mil visas, que representan 300 dólares por persona al mes en compras que realizaban en Estados Unidos y que son recursos que actualmente permanecen en la localidad".
Este aumento de ventas se contrasta con lo que sucede en Estados Unidos, que por el cierre de las fronteras se registra una reducción en las ventas y en la captación de impuestos por concepto de ventas y peaje, dijo López Campos.
Expuso que "de acuerdo con datos reportados por las Cámaras de Comercio de esa región, el cierre fronterizo terrestre disminuyó el movimiento de vehículos por esa franja en 50%, y el peatonal y no automotor en más de 60%, que principalmente son de consumidores doméstico, es decir, de mexicanos que acostumbraban comprar del lado estadounidense".
Ese impacto muestra que "las restricciones de ambos gobiernos no serían convenientes a largo plazo, porque se requiere normalizar la relación de intercambio de bienes y servicios en esa región, de manera sostenible como se ha dado desde hace muchos años, ya que de prolongarse esa situación podría ocasionar severos daños a la economía de ambas naciones".
Por ello, confió en que se reabrirán las fronteras en definitiva el próximo 21 de agosto, que fue la fecha que estipuló la autoridad estadounidense, ya que ello será favorable para comerciantes y prestadores de servicios de las ciudades fronterizas de México.