El olor a menta delató que no era un diente real. (INTERNET)
Rachel Wojciechowski, que vive en Devon, Inglaterra, compartió en redes sociales cómo es que descubrió la ingeniosa estrategia de su hija Iris para intentar engañar al hada de los dientes, con una menta partida a la mitad.
Según cuenta la madre, encontró el ‘diente falso’ debajo de la almohada de su hija mientras estaba tendiendo la cama. Sabiendo que su hija no había perdido ningún diente recientemente, le pareció extraño y preguntó.
Resulta que Iris partió una menta a la mitad e incluso coloreó parte del dulce de color rojo, para que pareciera un diente caído. Luego lo colocó debajo de su almohada, esperando una recompensa del hada de los dientes, como es tradición en estos casos, pero a la mañana siguiente, el dinero que usualmente recibe en ocasiones así, nunca llegó, recoge el diario Mirror.
