La segunda ola de la pandemia ralentizó la recuperación del Producto Interno Bruto durante el primer trimestre de 2021 y dejó al PIB en un nivel similar al del segundo trimestre de 2016. (ARCHIVO)
La economía mexicana alcanzó un mínimo crecimiento durante los primeros tres meses de 2021, producto del repunte de la pandemia en el primer bimestre, el choque de los apagones y la falta de gas natural en febrero, así como las disrupciones a las cadenas de suministros manufactureros, entre otros factores.
De acuerdo con los resultados de la estimación oportuna del Producto Interno Bruto, publicada por el Inegi, la economía habría crecido 0.4% en el primer trimestre de 2021 respecto al periodo inmediato anterior, tasa inferior al 3.3% alcanzado en los últimos tres meses del año pasado.
La segunda ola de la pandemia ralentizó la recuperación del Producto Interno Bruto durante el primer trimestre de 2021 y dejó al PIB en un nivel similar al del segundo trimestre de 2016, comentó en Twitter Julio Santaella, presidente del Inegi.
Pese a lo anterior, la estimación preliminar superó las expectativas de los especialistas que esperaban estancamiento o una ligera reducción en el periodo. Con este resultado, la economía logra acumular tres trimestres consecutivos al alza.
Por componentes, la actividad industrial reportó una nula variación durante los primeros tres meses del año, luego de que el cuarto trimestre de 2020 había registrado un alza de 3.9%
Los primeros dos meses de 2021 estuvieron caracterizados por una amplia cantidad de factores adversos para el sector. Al interior, los analistas esperan una recuperación en los servicios públicos y un rebote de las manufacturas tras los efectos de las heladas.
Sin embargo, este año algunas armadoras, tales como Toyota y Honda, anunciaron paros por la falta de materias primas, principalmente semiconductores, lo cual limitó el dinamismo de la industria automotriz.
En servicios, se reportó una expansión de 0.7% trimestral. Tras cierta debilidad en enero, la gradual y constante mejoría en las condiciones epidemiológicas desde mediados de febrero impulsó su dinamismo.
La creación neta de empleos y una menor incertidumbre apoyaron el consumo, las ventas al menudeo avanzaron en trimestre por el relajamiento de las medidas sanitarias, así como el impulso adicional que le pudieron dar las remesas, tras la aprobación del paquete fiscal en Estados Unidos.
El sector de restaurantes y hoteles se vio beneficiado en el margen por periodo vacacional de Semana Santa.
Por su parte, el sector agropecuario reportó una baja de 1.3% en el primer trimestre del año respecto al periodo inmediato anterior, con lo que acumula dos periodos consecutivos en terreno negativo.
De esta forma, la economía mexicana en el primer trimestre del año se mantiene 2.9% por debajo del nivel alcanzado un año antes previo a la emergencia sanitaria, con base en cifras ajustadas por estacionalidad.
Por grandes divisiones económicas, el PIB de las actividades industriales cayeron 2.3% y el de los servicios -3.6%, en tanto que el de las actividades agropecuarias alcanzaron crecer 2.8% respecto al primer trimestre de 2020.
El Inegi advierte en su comunicado que las estimaciones oportunas podrían cambiar respecto a las cifras generadas para el PIB trimestral tradicional, las cuales se publicarán el próximo 26 de mayo de 2021.