El valor de la piratería en México asciende a 101,694 millones de dólares. (ARCHIVO)
De acuerdo con el informe mensual de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicios y Departamentales (ANTAD), el valor de la piratería en México asciende a 101,694 millones de dólares, informó Jorge Dávila, presidente del Centro de Estudios Económicos del Comercio Servytur (CEECS).
El valor de la piratería en México es 34 veces más que el presupuesto anual del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), el cual asciende a 2,991 millones de dólares, a su vez, el presupuesto del IMPI es un 28% más que el presupuesto de Conacyt (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología), el cual es el encargado de promover el avance de la investigación científica, la innovación, desarrollo y modernización tecnológica del país.
La Cámara Americana del Comercio (AmCham) reportó que en conjunto con la Asociación Mexicana para la Protección de la Propiedad Intelectual (AMPPI) y la Asociación Nacional de Abogados de Empresas (ANADE), han realizado en los últimos cuatro años la destrucción de 13 millones de productos piratas y han capacitado a 2 mil agentes aduanales, aunque destacaron el reto que implica que 8 de cada 10 mexicanos consumen esta mercancía.
A raíz de la pandemia, la AmCham reportó que se ha encontrado un aumento en el tráfico de productos médicos, como mascarillas, medicamentos y venta de vacunas no certificadas en el barrio de Tepito, en la Ciudad de México. Ante esta situación es urgente la intervención del Estado, ya que estos hechos presentan un riesgo para la salud de la población.
La reproducción ilegal de obras perjudica fuertemente a diferentes industrias, entre los más afectados se encuentran las innovaciones, ya que el respeto a la propiedad intelectual es un principio básico de legalidad. Sin la certeza que las empresas requieren para operar, producir y competir, el Estado de Derecho presenta una debilidad al no brindar el ambiente de negocios lícitos en el país, y esto desincentiva la inversión que es necesaria para recuperar lo perdido por la crisis.
Para que la economía crezca y las empresas legalmente establecidas puedan seguir operando y generando mayor inversión en el país, es necesario brindar un entorno económico saludable, sin embargo, la piratería es un problema mayúsculo que impide generar este ambiente.
El presidente del CEECS dijo que la piratería es considerada como una vulnerabilidad del sistema jurídico de propiedad intelectual, ya que se ofrecen productos de baja calidad al consumidor, ya que los apócrifos brindan productos similares a un bajo precio, los gobiernos dejan de percibir ingresos debido a que el comercio se realiza en un entorno informal, que desincentiva la generación de empleos formales. Indicó que, además de generar problemas económicos, los productos de baja calidad son un riesgo para la salud y la seguridad de los consumidores.
Dijo que la informalidad en conjunto con la piratería afecta fuertemente los ingresos de los tres niveles de gobierno y, además, representa cada vez una mayor carga contra la actividad económica formal, tanto para la industria como para los comercios, por lo que es urgente que el Gobierno Federal atienda este fenómeno.
En este sentido, consideró de suma importancia reducir al mínimo este difícil problema, si es que el país quiere posicionarse como un país exitoso en la manufactura de bienes y salir rápidamente de la crisis provocada por la pandemia.