Rosibel Arriaza (i), madre de Victoria, explicó que era madre soltera y en su país no encontraba trabajo.
Los cuatro elementos de la Dirección de Seguridad Pública de Tulum que provocaron la muerte a Victoria Esperanza Salazar Arriaza, originaria de El Salvador, mediante el uso desproporcionado e inmoderado de la fuerza durante su detención, fueron sometidos a acción penal por el delito de feminicidio.
El fiscal General de Quintana Roo, Óscar Montes de Oca Rosales, informó que los peritos forenses concluyeron que la víctima presentó una fractura en la parte superior de la columna vertebral, producida por la ruptura de las primera y segunda vértebras, lo cual provocó "la pérdida de la vida de la víctima".
"Las lesiones referidas, de acuerdo con los dictámenes en materia de criminalística, medicina forense y material videográfico que forman parte de la carpeta de investigación, son compatibles y coinciden con las maniobras de sometimiento que se aplicaron a la víctima durante su detención y antes de fallecer.
"La técnica policial de control corporal aplicada y el nivel de fuerza utilizados se realizó de manera desproporcionada e inmoderada y con un alto riesgo para la vida, ya que no fue acorde con la resistencia de la víctima, lo que ocasionó una desaceleración o rotación del cuello, violándose con ello lo establecido en la ley nacional sobre el uso de la fuerza", explicó la fiscalía a través de un comunicado.
Con esos elementos, el Ministerio Público ejerció la acción penal contra los cuatro agentes -una mujer y tres hombres-, por su probable participación en el delito de feminicidio.
Después del mediodía, fueron trasladados al Centro de Readaptación Social de Playa del Carmen, para ser puestos a disposición de un juez de control.
La tarde del sábado los policías atendieron un reporte de desorden en la vía pública. Al llegar, detuvieron a una mujer, a quien sometieron hasta postrarla sobre el piso, esposada y boca abajo.
La agente de la policía inmovilizó a Victoria, colocando sus rodillas sobre el cuello, mientras la mujer gritaba y se quejaba, hasta que quedó inconsciente. Todo esto fue grabado en videos que fueron difundidos en redes sociales, provocando indignación de autoridades y sociedad.
DESTITUCIÓN
En este marco, el director de Seguridad Pública y Tránsito de Tulum, Nesguer Ignacio Vicencio Méndez, fue destituido del cargo, como responsable directo de los elementos que, al someter a Victoria, le provocaron la muerte.
Se precisó que Vicencio Méndez no está sujeto a investigación, por lo que sólo fue relevado.
Por su parte, el encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo, Lucio Hernández Gutiérrez, propuso a Carlos Lázaro Caraveo Vázquez como nuevo director General de Seguridad Pública en Tulum, lo cual deberá ser ratificado por el Cabildo.
CONDENAN
El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó el asesinato de Victoria Salazar a manos de policías de Tulum, y dijo que es un hecho que llena de dolor, vergüenza y no quedará impune.
El canciller Marcelo Ebrard calificó como delincuentes a los policías invoclucrados, y dijo que ya estaban en comunicación con el gobierno de El Salvador.
Senadoras de la Comisión para la Igualdad de Género pidieron capacitación para los policías y que el municipio de Tulum asuma su responsabilidad.
En El Salvador, el presidente Nayib Bukele publicó ayer en Twitter que "el caso de Victoria es mucho peor de lo que pensamos… el drama humano se extiende mucho más y debe haber varios cargos de misoginia y agresión [aparte del asesinato]".
BUSCABA OPORTUNIDADES
Victoria Esperanza Salazar Arriaza, la mujer que murió el sábado a manos de la policía en Tulum, Quintana Roo, era originaria de Sonsonate, El Salvador, y viajó a México hace cinco años, con la esperanza de dar a sus dos hijas una vida mejor.
Rosibel Arriaza, madre de Victoria, contó a medios salvadoreños que su hija, de 36 años, trabajaba en el área de limpieza en un hotel. Llegó a México sola y después la alcanzaron sus hijas, hoy de 15 y 16 años. Victoria, explicó Rosibel, era madre soltera y en su país no encontraba trabajo, por lo que decidió salir "en busca de mejores oportunidades".
Victoria tenía residencia permanente en México tras obtener una visa por razones humanitarias, según confirmó el Instituto Nacional de Migración (INM).
Ahora, la madre de Victoria está preocupada por sus nietas, quienes no tienen familia en México. Dijo que la Cancillería le informó que una de las menores está bajo custodia del DIF, pero que la otra no porque tiene miedo de la policía.