Concepto. Lo nuevo de Ricardo Milla contiene obras que emplean el número 13 en su discurso.
Emplear lo local para hablar de temas universales ha sido una constante en la obra de Ricardo Milla (Ciudad de México, 1974), artista que ha arribado a Torreón para inaugurar su exposición Triscaidecafobia en la Galería de Arte Contemporáneo del Museo Casa del Cerro.
Esta exposición aborda precisamente el miedo que distintas culturas sostienen hacia el número 13. El motivo de Millas para abordar el tópico, has sido precisamente el desarrollo de la pandemia por COVID-19, donde el poder espiritual del arte para ayudar a convocar o conjurar ciertas energías, se ha confirmado.
"En ese sentido, a través de estos conjuntos de obras, yo quería hacer una concatenación de energía y ayudar a rechazar la mala suerte que nos tocó al vivir esta pandemia tan desafortunada", comenta Ricardo Milla, en entrevista desde el Museo Casa del Cerro.
En un diálogo consigo mismo y con los demás, la obra contenida en Triscaidecafobia le ayuda a sobrevivir en la complicada actualidad. Por eso, Milla considera que la relación entre el arte y el número 13 es realmente copiosa.
"Finalmente somos seres de creencias y, como dice Manuel Escareño, uno de los organizadores, se deriva esa mala fama del número 13 desde varios factores. Uno sería como los personajes de La Última Cena, otro sería Loki, quien ocupaba la posición treceava en el panteón nórdico. Entonces, es bien curioso cómo se concatenan estas culturas totalmente disímbolas, son creencias donde coinciden. Estaba leyendo que un número de la mala suerte en China es el 4, porque suena similar a como se pronuncia la palabra 'muerte'. Entonces algunos edificios ya no tienen ni piso 13 ni piso 4. La misma creencia va alterando la realidad".
Según la ficha técnica, la exposición de Milla contiene series de obras formadas por 13 piezas. En su discurso se puede observar la obsesión del artista con el transcurso del tiempo y cómo esto se relaciona con la política y la economía, con las cifras y los mapas y con lo urbano y lo rural.
Las obras de Triscaidecafobia abordan distintos formatos, como fiel característica del arte contemporáneo. En ellas se emplea fotografía, instalación y pintura. Algunos elementos de Durango capital también hacen su aparición, pues el artista reside en esa ciudad desde hace años. Esto último coincide con la convicción de Millas sobre abordar lo local para diseñar discursos sobre lo universal.
Entonces, Milla refiere a una pieza que parece fungir como tapete sanitizante, pero que también forma parte de la exposición. Se trata de una fotografía a la sonrisa de un candidato. El resultado es revelador, pues el ser humano es de las pocas criaturas que puede mostrar los dientes sin simbolizar amenaza, pero que en el contexto actual genera reacciones.
"Esa sonrisa, ya que la veo montada de esta manera, es curioso porque no puede haber algo más local que un candidato de un partido a una diputación de la ciudad de Durango. Pero ya cuando lo veo, me recuerda a algo histórico, muy potente. Esa agresividad que veo en esa obra, me recuerda a Saturno devorando a su hijo de Goya y también a la versión de Rubens. Creo que básicamente, esa pieza se conecta con esas dos obras históricas que no tienen nada que ver con Durango o con el México de 2021, pero que de alguna forma seguimos siendo los mismos".
La exposición Triscaidecafobia estará en la Galería de Arte Contemporáneo del Museo Casa del Cerro hasta el próximo 24 de agosto.