Si ya no le alcanza el ingreso para cubrir sus deudas, hace uso de una tarjeta de crédito para comprar su despensa o le hablan a cada momento de los despachos de cobranza, es momento de que revise sus finanzas, pues podría estar en quiebra. La quiebra o bancarrota se refiere a un proceso legal en el que una persona se declara incapaz de pagar sus deudas, por lo que hacer esta declaración puede brindarle la oportunidad de un nuevo comienzo. (EL SIGLO DE TORREÓN / José Ignacio Díaz)
Si ya no le alcanza el ingreso para cubrir sus deudas, hace uso de una tarjeta de crédito para comprar su despensa o le hablan a cada momento de los despachos de cobranza, es momento de que revise sus finanzas, pues podría estar en quiebra. La quiebra o bancarrota se refiere a un proceso legal en el que una persona se declara incapaz de pagar sus deudas, por lo que hacer esta declaración puede brindarle la oportunidad de un nuevo comienzo.
Legalmente existen dos tipos de quiebras: quiebra voluntaria, también conocida como petición de deudores, y petición de acreedores, en la que alguien con quien estás endeudado te hace declarar la quiebra a través de un proceso judicial. Incluso, los bancos pueden realizarle una reestructura de su deuda ya sea a través de una reducción en el monto o en la tasa.
Pero antes de tomar una decisión es importante conocer algunas señales que indican que su situación financiera es apremiante:
1) Usa la tarjeta de crédito para sus necesidades básicas. Si usted ya está usando su tarjeta de crédito para pagar su despensa o bien pagar algún préstamo personal, es importante que analice cuál es su situación financiera. De acuerdo con Pablo Velázquez, titular de la Condusef en Coahuila, una tarjeta de crédito es un buen instrumento con ciertas promociones y para compras de bienes de consumo duradero, pero jamás para la compra de despensa o de consumo inmediato. 'Es una mala idea comprar ropa, o la despensa con una tarjeta de crédito; recuerden que el crédito no es dinero extra'.
2) Todo su ingreso es destinado a pagar préstamos a corto plazo. Si al llegar su salario o el ingreso quincenal o semanal lo tiene que repartir para pagar los préstamos que ha pedido a lo largo del periodo, es también una señal de que sus finanzas no andan bien. El salario que recibe debe distribuirse y usarse tanto para gasto corriente como para el pago de deudas, pero jamás su cartera debe quedar en ceros.
3) Gasta más de lo que recibe de ingresos. En una planeación de su presupuesto sus gastos deben representar el 70 por ciento de sus ingresos. Si sus salidas de dinero son mayores que sus entradas, es importante analizar en qué se está gastando y priorizar los renglones de las erogaciones.
4) Recibe llamadas constantes de acreedores. Puede resultar fastidioso recibir llamadas a cada instante, pero si ya es una constante en el día a día y de varios deudores, es importante que haga un alto en el camino y analice su situación financiera. '¿A quién le debo?', '¿cuánto dinero debo?' y '¿qué puedo hacer para resarcir esta problemática?'.
5) Falta de efectivo. La falta de efectivo para hacer pagos inmediatos es una señal negativa para sus finanzas personales, por lo que debe prestar atención a la razón por la que no trae efectivo. Si es por cuestión de seguridad o bien si es porque en realidad no tiene.
6) Se retrasa en las fechas de pagos. El retraso en el pago puede ser una mala organización de su agenda diaria, pero si los retrasos son por falta de recursos para afrontar sus deudas, es momento de pensar seriamente en sus finanzas.
Si sus finanzas personales presentan señales negativas, es momento de que tome acciones. Wolfgang Erhardt, vocero del Buró de Crédito, recomienda que si ya se está en un sobreendeudamiento, lo primero es hablarlo con las instituciones bancarias, ya que pueden ofrecer alguna opción de reestructura, ya sea en pagos o en la tasa; otra opción es traspasar todas las deuda a una reparadora financiera y establecer montos y plazos de pagos; finalmente, 'la menos recomendada', pedir al banco una reducción del monto. 'Esto no es muy recomendable, ya que esto se refleja en el historial crediticio'.
Pablo Velázquez, por su parte, recomienda empezar a liquidar las deudas más pequeñas y ese mismo dinero que se estaba pagando destinarlo después a deudas más grandes. Es importante aprender a administrar el gasto y si ya hay una problemática grave, es recomendable reducir los gastos al mínimo, principalmente pensar en el 'gasto hormiga'.