Un 36 por ciento de la electricidad producida en 2020 fue de productores independientes. (ARCHIVO)
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) realizó un análisis sobre el costo de eliminar a los Productores Independientes de Energía como proveedores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El Instituto mencionó que en 2020 los Productores Independientes de Energía (PIE) produjeron el 36 por ciento de la electricidad total que la subsidiaria de la CFE, CFE Suministrador de Servicios Básicos, compró ese año para atender la demanda de este insumo por parte de 45 millones de usuarios.
¿Qué pasaría si, como pretende la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), se redujera la cantidad de energía que actualmente compra la CFE a los Productores Independientes de Energía?
"La CFE necesariamente deberá generar por sí misma dicha energía. De no hacerlo, la empresa productiva del Estado no podrá suministrar la electricidad que demanden los hogares y las empresas del país, lo cual tendría serias implicaciones para la economía nacional y el bienestar de los mexicanos".
Mencionó también que con el propósito de estimar los costos en los que incurriría la CFE para sustituir la energía que ya no sería producida por los PIE, el IMCO construyó tres escenarios diferentes, bajo supuestos conservadores, a partir de datos oficiales. En cada uno de ellos se comparó el costo para la CFE de generar por sí misma la energía que dejaría de comprar a los PIE en 2021, además de toda la electricidad adicional que se demande en el país entre ese año y 2024, frente al costo de seguirles comprando dicha electricidad como lo ha hecho hasta ahora.
En el escenario uno se planteó el supuesto de que la CFE deja de comprar el 100 % de la energía que producen los PIE, o, lo que es lo mismo, que los PIE dejan de despachar al Sistema Eléctrico Nacional la totalidad de la energía que producen. Por su parte, en los escenarios dos y tres se supone que la empresa productiva del Estado deja de comprarles a los PIE el 66 % y el 50 % de la energía que producen, respectivamente.
A partir de este análisis se encontró que la CFE tendría costos adicionales de entre 141.6 y 382.8 mmdp (a precios de 2020) entre 2021 y 2024, según el escenario, debido a los nuevos costos que enfrentaría la empresa para generar por cuenta propia la energía que ya no sería producida por los PIE; entre ellos, costos de generación, inversión, operación y mantenimiento, además de los costos de indemnización a los PIE por la cancelación de su despacho de energía. Estos costos equivalen a entre 1 y 2.6 veces el presupuesto de la Secretaría de Salud para 2021 (145.4 mmdp).
Bajo cualquiera de los escenarios analizados, los costos adicionales para la CFE representan gastos innecesarios que no se presentarían en caso de que la empresa continuara comprando la energía producida por la iniciativa privada a los costos relativamente más bajos a los que este sector la genera y si continuara delegándole también la construcción, operación y mantenimiento de centrales de generación para atender la demanda de energía actual y futura de los hogares y las empresas mexicanas.
Los costos mencionados anteriormente representan una carga financiera que la CFE no puede ni tiene por qué asumir y que distraerá recursos que la propia empresa podría utilizar para invertir en áreas más relevantes y en las que es el único participante en el mercado, como las de transmisión y distribución de energía eléctrica. Por ejemplo, los 382.8 mmdp de gasto adicional estimados para la CFE en el escenario 1 equivalen a más de tres veces la inversión total en transmisión y distribución de energía eléctrica que la empresa productiva del Estado planea realizar entre 2021 y 2024 (114.9 mmdp -a precios constantes-), de acuerdo con su Plan de Negocios 2021-2025.
Dado que el decreto por el que se reforma la Ley de la Industria Eléctrica pretende, entre otras cosas, reducir el despacho de energía por parte de los PIE, el IMCO advierte que lo aprobado por los legisladores tendrá, entre otros aspectos negativos, costos asociados muy elevados para la propia CFE y para los mexicanos.
‘Impedirá Ley de hidrocarburos el dinamismo económico’
La iniciativa, enviada por el Ejecutivo Federal a la Cámara de Diputados el pasado 26 de marzo 2021, pretende reformar el mercado de hidrocarburos a través de restringir la libre competencia en la importación, comercialización y distribución de hidrocarburos, la revocación de permisos vigentes e incluso la expropiación indirecta de la infraestructura privada cuando la autoridad que haya emitido el permiso -Sener o CRE- determine que se atenta contra a la seguridad nacional.
De acuerdo con el análisis que realizó México, ¿cómo vamos?, la iniciativa de reforma a la Ley de Hidrocarburos, además de ser inconstitucional y contraria a los tratados internacionales, afectará a las familias mexicanas, según advirtió la Cofece el día de ayer, puesto que aumentaría los precios de bienes y servicios en un momento en el que el ingreso laboral real cayó en 2.5 % en el último año.
“La reforma busca permitir que Pemex o CFE ocupe y opere las instalaciones privadas cuando los permisos otorgados a privados queden revocados, sin la garantía de que alguna de estas empresas productivas del Estado cuenten con los recursos suficientes y necesarios para la operación exitosa”.
Con datos oportunos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) al cuarto trimestre de 2020, Pemex presentó un subejercicio de 101.9 mil millones de pesos y CFE 12.4 mil millones de pesos, reflejo de la poca capacidad operativa y administrativa que tienen las empresas productivas del Estado.
El 31 de marzo, la SHCP entregó al Congreso de la Unión el documento denominado Pre-Criterios 2022, documento con el que inicia la discusión presupuestal del próximo año, donde estiman que para inicios de 2022 la economía habrá recobrado totalmente su nivel previo a la pandemia.