Este aficionado de los Zorros es dueño de las Tortas Ahogadas Don Albert, un local en la calle de Prisciliano Sánchez en el Centro de Guadalajara, con 16 años de existencia. (EL UNIVERSAL)
Cuando se espera tanto para poder ver a tu equipo campeón, los sentimientos previos al juego decisivo, a la gran final, se pueden desbordar al punto de la locura y lo que vive en estos momentos la afición del Atlas es justo eso: una locura.
Por eso se entiende perfectamente cuando Julio César habla de la oferta de comida gratis si los Rojinegros consiguen el título. Aunque también el poder cumplir con esta oferta será un homenaje a su padre, fallecido hace cuatro años.
Este aficionado de los Zorros es dueño de las Tortas Ahogadas Don Albert, un local en la calle de Prisciliano Sánchez en el Centro de Guadalajara, con 16 años de existencia.
"Somos los oficiales de los Rojinegros, mi padre (don Albert) era fanático de hueso colorado atlista, tenía muchos amigos en el club y toda su vida le fue al equipo y quería verlo campeón", comenta Julio César, quien toma un respiro y aunque de alguna manera se apaga al compartir la tristeza porque su padre ya no esté para ver a sus Rojinegros en la final, confía en que el cuadro atlista levante su segundo título de Liga.
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"A nosotros como sus hijos nos dejó ese sentimiento atlista", agrega. "El anhelo de mi jefe era el título y a todo el mundo le decía que el día que saliera campeón vamos a regalar 300 tortas y 500 tacos dorados".
Para cumplir el sueño de ese gran atlista, don Albert, a quien se puede conocer en las muchas fotografías que cuelgan de las paredes del local en las que se puede observar y hasta sentir la pasión que tenía por los rojinegros. "Estaré en el estadio, tenemos vara alta (ríe) y esperemos ser campeones… ¡Puro Atlas!", finaliza Julio César mientras termina la salsa para las tortas ahogadas.
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