Una ola de calor azotaba el jueves el sureste de Europa, donde los residentes acudieron apresuradamente a la costa, fuentes públicas y localidades con aire acondicionado para encontrar alivio. (ARCHIVO)
Una ola de calor azotaba el jueves el sureste de Europa, donde los residentes acudieron apresuradamente a la costa, fuentes públicas y localidades con aire acondicionado para encontrar alivio.
Las temperaturas superaron los 40 C (104 F) en partes de Grecia y del resto de la región. Meteorólogos en Atenas dijeron que esperaban que la ola de calor se extienda a la semana próxima, lo que le haría una de las más severas desde mediados de los ochenta.
En la capital griega se establecieron centros para refrescase, pero el acceso a los lugares públicos con aire acondicionado estaba limitado por las restricciones de la pandemia.
“La ola actual de calor es un fenómeno climático peligroso, pues durará hasta el final de la semana próxima con un rango pequeño entre las temperaturas mínimas y máximas”, dijo Theodoris Kolydas, director del servicio nacional de meteorología.
Las autoridades en Serbia, Bulgaria y otras naciones afectadas le recomendaron a la población evitar exponerse directamente a la luz del sol en las horas del mediodía.
En tanto, incendios forestales en Grecia amenazaban viviendas por tercer día consecutivo, uno de ellos en las afueras de la ciudad de Patras.