(ANDRE PAIN / EFE)
El Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves subir los tipos de interés medio punto, hasta el 2.5 %, su nivel más alto desde diciembre de 2008, y prevé "seguir incrementándolos significativamente" para contener la inflación, que "continúa siendo excesivamente elevada".
Tras la reunión del Consejo de Gobierno, el BCE ha informado en un comunicado de que también incrementa en 50 puntos básicos la facilidad de crédito, a la que presta a los bancos a un día, hasta el 2,75 %, y la facilidad de depósito, a la que remunera el exceso de reservas a un día, hasta el 2 %.
"El Consejo de Gobierno estima que los tipos de interés tendrán que incrementarse aun significativamente a un ritmo sostenido hasta alcanzar niveles suficientemente restrictivos para asegurar que vuelvan a situarse de forma oportuna en el objetivo del 2 % a medio plazo", según el comunicado.
El BCE ha recalcado que "la inflación continúa siendo excesivamente elevada" y que se proyecta "que se mantenga por encima de su objetivo durante demasiado tiempo".
Se trata de la cuarta subida consecutiva de los tipos acometida por el BCE, tras las de julio, septiembre y octubre, con las que el banco central pretende contener la inflación en la eurozona, que en noviembre cayó por primera vez en 17 meses hasta el 10 %, después de que en octubre marcase un máximo en el 10.6 %.
Este descenso se debió principalmente a una bajada de la inflación de los precios de la energía, según el BCE, que ha destacado que "la inflación de los precios de los alimentos y las presiones inflacionistas subyacentes en el conjunto de la economía han aumentado y persistirán durante algún tiempo".
En este contexto "de un grado excepcional de incertidumbre", el BCE ha revisado al alza su previsión de inflación en la Eurozona para este año, hasta el 8.4 % (tres décimas más), así como las de 2023, hasta el 6.3 % (ocho décimas más), y 2024, hasta el 3.4 % (1.1 puntos más); y ha avanzado que la de 2025 será del 2.3 %, todavía por el objetivo del 2 %.
Una vez excluidos la energía y los alimentos, el BCE prevé que la inflación subyacente se sitúe en el 3.9 % en 2022, que aumente hasta el 4.2 % en 2023 y que descienda hasta el 2.8 % en 2024 y el 2.4 % en 2025.
Para el banco central, mantener los tipos de interés en niveles restrictivos reducirá la inflación moderando la demanda y también servirá de protección frente al riesgo de un desplazamiento persistente al alza de las expectativas de inflación.
Ha recalcado que las decisiones futuras del Consejo de Gobierno relativas a los tipos de interés oficiales continuarán dependiendo de los datos y seguirán un enfoque en el que las decisiones se adoptarán en cada reunión.
En su última reunión de política monetaria del año, el BCE ha cumplido así con las expectativas del mercado al levantar el pie del acelerador tras las dos últimas subidas de tipos, que fueron de 75 puntos básicos.