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En tan sólo 12 días, se han atendido entre 140 a 180 migrantes en el Centro de Día "Jesús Torres", y se espera que la cifra siga creciendo en lo que resta de este mes de diciembre, ya que los viajantes esperan se retire el llamado título 42, documento con el que Estados Unidos puede impedir la entrada de personas por cuestiones sanitarias por el COVID-19, medida que esperan termine este 21 de diciembre.
Concepción Martínez, coordinadora del Centro, comentó que, al momento, es el mes de noviembre cuando más migrantes se han atendido, al cerrar con un total de 377, siendo el día 5, cuando acudió el grupo más numeroso, de 70 viajeros.
Fue precisamente en esa fecha, cuando se registró el hecho que se denunció luego de que Policía Especializada de la entidad despojaran a cuatro migrantes de su dinero, además, "les bajaron los pantalones y ropa interior", en una "clara violación a sus derechos humanos", señalaron en su momento.
De acuerdo con Martínez, "al quitar ese título 42, piensan que la frontera se va a abrir, ellos tienen esa idea y por eso están esperanzados en pasar", sin embargo, debido a los brotes que se han dado en aquel país, se podría extender dicha medida.
"Lo más seguro es que lo vayan a alargar, porque ha habido muchos brotes, y el gobierno de Estados Unidos eso es lo que está buscando, que la gente no llegue, para ellos cualquier 'pretexto', por decirlo de alguna manera, será bueno", comentó.
En cuanto a la atención, la coordinadora comentó que fue desde el mes de febrero que se abrieron las puertas a los migrantes solo para tomar un baño y para el mes de junio, se abrió con normalidad para que pudieran descansar, esto luego de dos años de pandemia, en los que no se dejó de atender, pero sólo a través de una ventanilla.
Comentó que entre los grupos que han acudido, se han detectado familias completas con sus niños e incluso mujeres embarazadas. Del 10 por ciento de mujeres que se registraron, un 6 por ciento podría encontrarse embarazada.
Y recientemente, se han detectado más ecuatorianos, venezolanos y colombianos, y sobre todo en familia.
Por otra parte, comentó que se mantiene el llamado de ayuda, sobre todo para abastecer de jabón y cloro, pues todo lo que utilizan se desinfecta, así como la ropa que dejan para recibir un cambio y así continuar su camino.
