CIJ mantiene programas de prevención en secundarias y preparatorias para evitar el consumo de drogas.
El Centro de Integración Juvenil (CIJ) Torreón, llama a los padres de familia de las menores que resultaron intoxicadas al consumir clonazepam, a no bajar la percepción del riesgo y solicitar su apoyo, sin importar que haya sido la primera vez que consumen este tipo de medicamentos controlados.
Cecilia Martínez, responsable del CIJ en esta ciudad, recordó que en la Escuela Secundaria número 12 Carlos Delgado López, de ciudad Nazas, donde fueron reportadas nueve menores intoxicadas, se trabaja de forma permanente, puesto que no es la primera vez que sucede.
"Es una escuela en la que trabajamos de manera permanente los programas de prevención. Esta situación no es la primera vez, es una situación que pasa en otras escuelas, y generalmente lo que nosotros esperamos es que la escuela haga la referencia, porque tiene que informar a los padres de familia y ya una vez informados, nos los remitan para darles tratamiento a tiempo", explicó Martínez.
De acuerdo con la responsable del Centro, el consumo de las llamadas benzodiacepinas es común, sobre todo en adolescentes de secundaria y preparatoria, debido a la facilidad de acceso a ellas, pues son medicamentos controlados que regularmente se encuentran en casa con una baja o nula supervisión.
"Las benzodiacepinas es en consumo bajo, no es la droga de mayor impacto en el Centro de Integración Juvenil, pero sí es frecuente, porque son adolescentes que empiezan a experimentar y generalmente lo utilizan como depresor", comentó.
A fin de reducir su consumo en este grupo población, la responsable del Centro recomendó a los padres de familia extremar cuidados con este tipo de medicamentos, cuyo consumo en los menores es ilegal.
"Que tuvieran supervisión, que tuvieran control, esos medicamentos tienen que estar bajo llave y los tienen que resguardar y alejarlos de los muchachos por supuesto, informarse y acercarse para que pidan orientación, porque sí puede generar intoxicación y hasta la muerte", detalló.
A nivel regional, su consumo se encuentro dentro de la quinta posición de las drogas ilegales, por debajo del cristal, la cocaína, marihuana y los inhalables.
