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Aunque a partir del primero de julio será obligatorio para los contribuyentes tener su constancia de situación fiscal, no todos están entusiasmados con tramitarla.
La reticencia hace uso de argumentos que varían desde: “no la voy a andar cargando cuando voy de vacaciones”, “es más trabajo administrativo” o hasta el hecho de que algunos solicitan que sea del mismo día en que se pide la factura.
Yamile Dávalos Rosillo, gerente de facturación en Facturador.com, aclara, sin embargo, que es un documento indispensable que sirve para demostrar que los datos del contribuyente han sido actualizados. La constancia debe de contener el nombre, CURP, domicilio discal y el régimen fiscal en el cual se tributa.
El requerimiento forma parte del paquete de cambios en materia fiscal para 2022, dictados por el SAT - junto con la carta porte - y no solo implican a los trabajadores asalariados, sino también a todos aquellos que presten algún servicio.
En el caso de los trabajadores, presentarla es necesario ya que de lo contrario habrá problemas al timbrar la nómina o hacer deducible el gasto de erogación de sueldos y salarios.
Para quienes emiten facturas electrónicas también es determinante, ya que si una persona emite una factura que no tenga los datos correctos puede ser sancionado con multas onerosas.
En resumen, es requisito indispensable que tanto quien solicita la factura, como el que la expide, presente su Constancia de Identificación Fiscal. La solicitud del SAT provocó la saturación de citas en su portal, pero es indispensable, ya que evitará errores de datos y sanciones.
Si los contribuyentes quieren deducir de impuestos sus compras, los datos deben ser correctos, ya que si el comprobante tiene otros datos, podría no ser deducible. “Sabemos que los cambios, sobre todo en lo relacionado con el fisco, nos pueden tomar por sorpresa, por eso si se tienen dudas se puede acudir al SAT, a su contador o a los PAC, que lo mismo ofrecen ayuda con una factura electrónica que con un software contable”, comentó Dávalos Rosillo.
Según el SAT, la obligación de la emisión de facturas electrónicas o recibos de nómina en el sistema la Factura Electrónica 4.0, para lo cual los contribuyentes pueden requerir su Constancia de Situación Fiscal, iniciará a partir del 1 de julio de 2022.
