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Cuando el Houston Firefighters Relief and Retirement Fund, un fondo de ahorro de bomberos jubilados, compró 25 millones de dólares en criptomonedas y el director de inversiones del fondo promocionó su potencial, el capitán de bomberos jubilado Russell Harris se preocupó.
Harris, de 62 años, ha asistido a los funerales de 34 colegas muertos en el cumplimiento de su deber. Ya estaba preocupado por su pensión después de que una reforma estatal y municipal recortó los pagos mientras trataban de pagar las prestaciones. Harris no veía en las criptomonedas una respuesta.
“No me gusta”, dijo Harris. “Hay demasiados esquemas piramidales en los que todo el mundo se ve envuelto. Esa es la forma en que veo esta criptomoneda en este momento… Podría haber un lugar para eso, pero aún es nuevo y nadie lo entiende”.
La caída de los precios del Bitcoin y otras criptomonedas en las últimas semanas proporciona una advertencia para el puñado de fondos de pensiones públicos que han recurrido a las criptomonedas en los últimos años. La mayoría lo ha hecho indirectamente a través de acciones o fondos de inversión, pero la falta de transparencia dificulta saber si han ganado o perdido dinero, o cuánto.
Pero el reciente colapso de las criptomonedas ha generado una pregunta más amplia: para los fondos de pensiones de maestros, bomberos, policías y otros trabajadores públicos ¿es demasiado arriesgada cualquier cantidad de inversión en criptomonedas?
Muchos fondos públicos de pensiones en Estado Unidos tienen recursos insuficientes —a veces críticamente— lo que los lleva a tomar riesgos. Pero eso no siempre funciona, y el riesgo se extiende no solo a los fondos sino también a los contribuyentes que podrían tener que rescatarlos, ya sea a través de impuestos más altos o desviando el gasto de otras necesidades.
Keith Brainard, director de investigación de la Asociación Nacional de Administradores de Jubilaciones Estatales, dijo que no conocía más que un puñado de fondos públicos de pensiones que habían invertido en criptomonedas.
“Puede llegar un día en que las criptomonedas se establezcan y se entiendan adecuadamente y maduren como una inversión potencial que los fondos públicos de pensiones podrían adoptar”, dijo Brainard. “Simplemente no estoy seguro de que estemos allí todavía”.
El Departamento del Trabajo recomienda tener “cuidado extremo” en las inversiones en criptomonedas debido a los altos riesgos. La reciente caída de los precios de las criptomonedas ha provocado que Washington examine más de cerca a este sector. Después del colapso de la moneda virtual Terra por 40 mil millones de dólares, los senadores estadounidenses propusieron por primera vez una legislación que regularía las criptomonedas, mientras que la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, pidió una mayor supervisión de las empresas criptográficas.
