(FOTO: FERNANDO COMPEÁN)
Cada edición del Maratón Lala es diferente. En lo deportivo, es raro que alguien repita como campeón, de poder demostrar que es el más rápido en la distancia de los 42.195 kilómetros, sobre un trayecto plano en la Comarca Lagunera.
Pero este 2022 fue único. Tras un año de ausencia debido a la pandemia del COVID-19, la agotadora prueba, regresó de manera presencial y la gente de la región lo supo valorar al máximo.
En Gómez Palacio, Ciudad Lerdo y Torreón, la gente salió en numerosa cantidad y a temprana hora. Animó a los miles de competidores que tomaron la salida 15 minutos antes de las 7 de la mañana en el Parque Industrial Lagunero.
Durante el recorrido de los atletas, se escuchaban gritos en los costados de las calles como: "ya los tenemos de vuelta, bienvenidos", "ustedes pueden, no se desanimen", "faltan kilómetros pero no corren solos".
Los grupos de animación fueron importantes desde la salida del sol, en un maratón que se recordará por ser sumamente caluroso, donde los estragos hicieron mella entre los participantes, sobre todo, a quienes cruzaron la META después de las 10 de la mañana.Pero los atletas se refrescaron con los puestos de hidratación implementados a lo largo del trayecto, así como las esponjas que se ubicaron después del kilómetro 21, sobre la Avenida Madrid. Incluso una señora utilizó la manguera de su casa, para refrescar a los corredores a su paso.
Un auténtico problema encontraron los jueces del concurso de porras, para poder determinar a los ganadores, ya que en las tres ciudades y ubicados estratégicamente en varios kilómetros a lo largo del recorrido, los equipos registrados ante el comité organizador, hicieron de las suyas, para deleite de los participantes.
De las que más llamó la atención por su colorido y originalidad, fue la Porra Guerrera del Santos Laguna, ubicada casi frente a la Unidad Deportiva de Ciudad Lerdo. En otros puntos, personas de todas las edades, le dieron colorido con sus porras, coreografías y outfits, para enaltecer la Gran Fiesta Lagunera.
Pero también la gente que se ubicaba sobre la ruta del maratón, salió no solamente apoyar, sino que puso a su disposición hidratación, fruta, chocolates y barras energéticas, para los corredores recreativos, que engrosan casi la totalidad del cupo, que en esta ocasión, fue reducido al 70 por ciento de su capacidad, por cuestiones de protocolos sanitarios.
Los abrazos en la META no se hicieron esperar, ya que algunas parejas y otros amigos, corrieron juntos. Una participante tuvo un final feliz de maratón, cuando justo debajo del Arco del Triunfo, le pidieron matrimonio.
