(Lewis Joly / AP)
El presidente francés Emmanuel Macron visitó un polígono de pruebas de cañones Caesar y misiles el jueves, en una muestra de la capacidad militar del país.
El palacio presidencial dijo que la visita de Macron al centro de pruebas del Directorio General de Armamentos y una fábrica de armas de Nexter Arrowtech — ambos en la región central de Cher — está dirigida a recordarles a los “fabricantes de armas del objetivo de producir suficiente, más rápidamente y a precios controlados”.
Visitó además la escuela militar de Burges junto con el ministro de defensa Sebastien Lecornu.
Las visitas se producen cuatro meses después que Macron expresó la necesidad de adaptar las fuerzas armadas de Francia a nuevas condiciones en medio de una guerra en Europa.
En junio, Macron les ordenó a los ministros de sus fuerzas armadas que reevaluasen la estrategia militar y la manifactura de armamento debido a “esta guerra de alta intensidad que ha regresado al suelo europeo”. Dijo que Francia debe incrementar su capacidad y su presteza militares.
La retórica del presidente y su visita a Cher resalta el dilema de muchos miembros de la OTAN, que han enviado miles de millones en armamento a Ucrania para ayudar a su defensa, pero están bien conscientes de prepararse para el caso de que Rusia los agreda.
Escaseces de armas en Europa, incluyendo en Francia, pudieran forzar decisiones difíciles para los aliados de Ucrania.
Este mes, Francia prometió enviar sistemas de defensa antiaérea para proteger las ciudades ucranianas de ataques con drones, además de la expansión de un programa de entrenamientos de soldados ucranianos, tratando de disipar percepciones de que el gobierno de Macron se ha demorado en su respaldo militar a Ucrania contra la invasión rusa.
