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Las empresas españolas no se quieren ir de México, lo único que quieren es previsibilidad y seguridad jurídica, aseguró el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares Bueno.
Durante su estancia en México el jueves pasado, luego de encabezar con el canciller Marcelo Ebrard la XIII Reunión de la Comisión Binacional México-España, en la que ambos se congratularon de que, tras casi un año, el gobierno mexicano levantó la "pausa" en la que había puesto la relación con el gobierno español, el ministro Albares sostuvo que las relaciones bilaterales tenían una "salud de hierro".
Sin embargo, menos de 12 horas después, la mañana del viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló tajante que "continua la pausa porque no hay, de parte de ellos, una actitud de respeto", ya que no recibió respuesta del Rey Felipe VI a una carta de 2019 en la que le solicitó ofrecer disculpas por el exterminio y represión de los pueblos originarios durante la Conquista. El gobierno español respondió que las declaraciones de López Obrador "resultan incomprensibles" después de "una exitosa" Comisión Binacional entre España y México, "que tantos resultados concretos ha ofrecido".
Albares afirmó que en la binacional se tocó el tema de la crisis en Perú y que ambas naciones acordaron unir fuerzas, a fin de evitar cualquier tipo de enfrentamiento civil y buscar una solución del conflicto por el cauce constitucional democrático.
En un espacio de tres semanas se ha tenido una interparlamentaria México-España y una comisión binacional, ¿hemos pasado del andante con pausa al alegro con brío?, se le cuestionó.
El funcionario español recalcó que "hemos pasado a visualizar una relación que ya existía, una relación entre dos países hermanos, fraternal, que se compone de 160 mil españoles en México, 60 mil mexicanos en España, muchos con doble nacionalidad; siete mil empresas españolas en México; 700 mexicanas en España y cientos de estudiantes, profesores, intelectuales e intercambios de obras literarias y de todo tipo. Todo eso ya pedía una comisión binacional".
"Las empresas españolas están en México desde hace muchos años, se sienten ya como empresas mexicanas y lo que quieren es seguir participando en el desarrollo integral, digital, de este país", sentenció.