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En el marco del Día Internacional contra la Violencia y Acoso Escolar, el diputado Londres Botello llamó a crear consciencia desde el hogar y en las escuelas para erradicar el problema, en el que también se incluye el ciberacoso, el cual aseguró, se incrementó durante la pandemia del COVID-19, tiempo en el que los menores mantuvieron su educación a distancia.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), establecido cada primer jueves de noviembre de cada año, como el Día Internacional contra la Violencia en la Escuela (bullying) incluido el ciberacoso.
“Este día tiene como objetivo sensibilizar a las personas a escala mundial acerca de la violencia de la violencia y en ciberacoso sus consecuencias y la necesidad de ponerles fin. También hace un llamado a los alumnos, los padres, demás miembros de la comunidad educativa y a las autoridades encargadas de la educación de los diversos sectores, a ponerle atención al problema para incitarlos a contribuir a la prevención de la violencia en línea con miras a garantizar la seguridad y el bienestar de los niños y adolescentes”, explicó el legislador.
Expuso que a escala mundial se estima que 246 millones de niños y adolescentes podrían ser víctima de la violencia al interior y alrededor de sus escuelas. Y de acuerdo la Organización Internacional Bulliyng sin Fronteras, en México 7 de cada 10 niños sufren un tipo de acoso a diario es decir, de los más de 40 millones de alumnos alrededor de 28 millones padece esa forma de violencia.
Igualmente se estima que el 80 por ciento de los casos no son reportados al personal docente, el 60 por ciento de los acosadores, tendrán al menos un incidente delictivo en la edad adulta y 3 millones de estudiantes se asuntas de la escuela cada vez a causa del maltrato o de ese acoso escolar.
“Las escuelas que no son seguras, violan el derecho a la educación proclamado por la convención de los Derechos del Niño, adoptada por las Naciones Unidades e incumplen a la convención relativa a las discriminaciones en la esfera de la enseñanza cuyo objetivo es eliminar cualquier discriminación”, detalló el diputado local.
Dijo también, que cuando un niño o adolescente es agredido de manera verbal o física, comienza a mostrar una serie de comportamientos bastante característicos como: bajo rendimiento escolar, síntomas de depresión, baja autoestima, y en el peor de los casos el deseo de atentar contra su vida.
Motivos por los que el diputado consideró necesario, trabajar en unión, “crear escuelas libres de acoso donde toda la comunidad establezca relaciones interrelaciones, armónicas, pacíficas e inclusivas basadas en valores y en el respeto de los derechos humanos. Es necesario trabajar con los niños y adolescentes antes de que aprenda a reaccionar violentamente”, y agregó “es necesario también, crear consciencia desde el hogar y las escuelas para que este problema se termine”.