(ARCHIVO)
Para evitar que la inflación se atrinchere por un tiempo más prolongado, analistas consultados por EL UNIVERSAL advirtieron que se requiere más firmeza en la aplicación de políticas fiscales y monetarias.
A casi tres meses del lanzamiento del Paquete contra la inflación y la carestía (Pacic) y a poco más de una semana para que el Banco de México (Banxico) anuncie si subirá su principal tasa de interés en la misma magnitud que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, expertos pidieron evitar ser complacientes contra una carestía que llegó a 8.2% en la primera quincena de julio, la mayor tasa en 21 años.
No hay que esperar sentados a que surtan efecto las medidas tomadas para que vuelvan a caer los precios al consumidor, ni a ver cómo se debilita la economía, opinaron.
En sus expectativas económicas mundiales, el Fondo Monetario Internacional (FMI) sugirió aplicar reformas por el lado de los impuestos o recortar el gasto para enfrentar lo que vendrá en 2023.
Si bien el organismo no está previendo una recesión mundial, alertó que se debe actuar de frente para poder sortear una desaceleración profunda el próximo año.
Para México, si bien subió su estimado para la economía este año de 2% a 2.4%, la recortó a 1.2% al siguiente.
Para tratar de frenar la inflación, Banxico va a anunciar otra alza de 75 puntos base en su principal tasa el próximo 11 de agosto, para llevarla de 7.75% a un máximo histórico de 8.50%, coincidieron las 31 instituciones encuestadas por CitiBanamex el mes pasado.
ATADO DE MANOS
El economista en jefe para América Latina de UBS, Rafael de la Fuente, dijo que las autoridades tendrán que llevar a cabo medidas más fuertes si se dan choques extra a los que se están observando.
No obstante, dado que Banxico está atado de manos, ahí debe entrar la política fiscal.
"Ante esa tesitura, la política monetaria está un poco atada de manos", advirtió.
No obstante, consideró que esa convicción del banco central, se pone en entredicho por la misma naturaleza del choque doméstico, debido a que la demanda doméstica está muy fuerte por un sobre calentamiento de la economía y un mercado laboral estrecho con fuertes subidas salariales.
Pero eso no quiere decir que no deba reaccionar, pues debe mandar el mensaje de que las expectativas de inflación están ancladas o que hará lo necesario para conseguirlo.
Recordó que varios países han tomado medidas de política fiscal para bajar la inflación como en México, mediante un subsidio al precio de las gasolinas, lo que significa quitar el impuesto a los consumidores gracias a que lo puede costear por ser productor de petróleo, lo que ha mantenido la inflación contenida respecto a otras economías.
"Hay distintas medidas, pero no hay una bala perfecta sobre todo ante choques externos tan poderosos como los que vemos", afirmó.