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El Fondo Monetario Internacional (FMI) celebró este viernes que Reino Unido se haya echado atrás y vaya a "recalibrar" su plan fiscal y se mostró confiado en el compromiso de este país de "hacer lo necesario" para mantener la estabilidad económica.
El comentario del director del departamento de Europa del FMI, Alfred Kammer, llega horas después de que la primera ministra británica, Liz Truss, haya anunciado la destitución del ministro de Economía y su intención de echarse atrás en muchas de las medidas de su plan.
"Damos la bienvenida al compromiso del gobierno de desarrollar una oficina de responsabilidad presupuestaria y de que el Reino Unido continúe haciendo lo necesario para abordar la disfunción del mercado y preservar la seguridad financiera", dijo Kammer en una conferencia de prensa.
El hasta ahora ministro británico de Economía, Kwasi Kwarteng, aceptó su destitución, en medio de crecientes presiones al Gobierno por el anuncio el pasado 23 de septiembre de un controvertido plan fiscal con masivos recortes de impuestos.
En una rueda de prensa, Truss reconoció este viernes que su plan fiscal fue "más lejos y más rápido" de lo que podían tolerar los mercados, por lo que ahora rectificará "de forma decisiva" y, entre otras medidas, subirá el impuesto de sociedades como estaba previsto por el anterior Ejecutivo de Boris Johnson.
Precisamente ayer, en una rueda de prensa celebrada en el marco de las reuniones anuales que celebra el Fondo, en las que Kwarteng participó, la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, reprendió a Londres por sus planes de recortes fiscales, y advirtió al ministro de Finanzas y al jefe del banco central que sus políticas no deben ser contradictorias.
"Si la política fiscal socava la monetaria, entonces el objetivo de la política monetaria se vuelve más complicado", comentó la economista. Georgieva urgió a las autoridades británicas a no "prolongar el sufrimiento", y a dejar que los datos guíen sus decisiones.
La jefa del FMI recomendó que cualquier recalibración de las políticas debe estar guiada por la evidencia. Y en este momento, la evidencia apunta a la necesidad de que los gobiernos sigan luchando contra la inflación, aunque hacerlo aumente el riesgo de una recesión mundial.
Por su parte, Kammer explicó hoy que esperan conocer los detalles del nuevo plan económico de la primera ministra para poder evaluarlo.
"El Reino Unido es un país con instituciones sólidas" y "seguimos teniendo relaciones muy estrechas" con el país, añadió.
