Pese a la buena venta que se ha registrado en esta Cuaresma, impacta el alza del limón en la utilidad de los restaurantes.
Esta Cuaresma ha representado un incremento en el consumo de pescados y mariscos para los restaurantes que tienen este giro, cerca de los niveles de ventas que se tuvieron en el 2019, antes de la pandemia por COVID-19, sin embargo, los aumentos en las cuotas del IMSS y las alzas por la inflación han impactado severamente en la utilidad.
Guillermo Martínez Ávila, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), explicó que se ha observado una diferencia considerable en el comparativo de esta Cuaresma con la de los últimos dos años, pues en 2021 y 2020 los consumidores optaron por quedarse en casa y las ventas se mantuvieron muy bajas. No obstante, en la actualidad casi se alcanza el nivel de 2019.
"Estamos entre un 5 y 10 por ciento abajo de lo que traíamos de ventas en 2019, que es algo muy importante, hay una mayor confianza de los clientes por salir y asistir a los restaurantes que venden pescados y mariscos, ha sido notoria", comentó.
Reconoció que existen otros factores este año que impactan, como ha sido el aumento continuo en el precio del limón, pues la mayoría de los platillos en giro recurren a este ingrediente, además del aguacate. Señaló que se han tenido impactos en los insumos, que se han incrementado desde el año pasado, además de que la nómina también les ha subido, luego de que se autorizara el alza en el salario mínimo, del 22 por ciento, lo que elevó las cuotas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
"Es un incremento del 22 por ciento directo que pega en nuestra nómina, entonces sí, nuestra utilidad, nuestros beneficios, han bajado considerablemente, pero con las ventas y generando más clientes lo podemos revertir", expresó, "la utilidad nos ha bajado arriba del 10 a 15 por ciento, sí es algo muy preocupante".
Martínez Ávila dijo que la inflación del 7.5 por ciento en el país se ha percibido por encima del 15 por ciento para la industria gastronómica.
El titular de la Canirac en Torreón dijo que el precio del limón se ha incrementado hasta un 300 por ciento, pero el gremio restaurantero no puede estar subiendo y bajando los precios, como lo hacen los perecederos. Indicó que las ventas no han bajado pero la utilidad sí se ha visto afectada.
