Esta técnica ha demostrado una menor morbilidad, comparada con la cirugía a cielo abierto clásica. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Con el propósito de disminuir la convalecencia y los riesgos quirúrgicos a los donadores vivos de riñón, la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) No. 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Torreón, incorporó la nefrectomía laparoscópica a su cartera de servicios.
El doctor Néstor Escareño Montiel, titular de la Unidad de Trasplantes, explicó que este procedimiento consiste en la extracción del riñón por medio de pequeñas incisiones y con el apoyo de instrumentos que se insertan en el abdomen, lo que también se conoce como "cirugía de mínima invasión".
Según comentó, esta técnica ha demostrado una menor morbilidad, comparada con la cirugía a cielo abierto clásica, además disminuye el dolor y la necesidad de analgesia, aunado a que brinda una recuperación más rápida y la persona podrá reincorporarse a sus actividades en menor tiempo.
"Ya estamos a la vanguardia en cuanto a cirugía de mínima invasión...el dolor es mínimo y la recuperación es más rápida y pues le va mucho mejor a los donadores, esperamos de aquí en adelante hacer todo por laparoscopía. Ya estamos ofertando ahora sí un servicio pues a la altura", dijo.
La institución de salud dio a conocer que este procedimiento ya se realizaba en otros centros médicos y ahora se extiende al Hospital de Especialidades No. 71.
Escareño Montiel abundó que la mayoría de los trasplantes son a través de donadores vivos de riñón por lo cual representa un beneficio importante.
El médico indicó que tras la emergencia sanitaria por COVID-19 el hospital realiza un promedio de tres trasplantes por semana, con extremas condiciones de seguridad a fin de proteger a la población.
Escareño Montiel, añadió que, estéticamente, la cicatriz que queda en los pacientes es mínima.
De igual forma señaló que en el Hospital de Especialidades No. 71 del Seguro Social se están realizando tres cirugías de mínima invasión por semana.
