Jóvenes emprenden con proyectos ecológicos en feria de Pereyra

Monederos, bolsas, mochilas y lapiceras hechas a partir de lonas reutilizables, con un proceso artesanal, a fin de darle una segunda vida útil a este material es la propuesta de Emilio Salas, Ángel Crispín, Francisco Lozano y José Manuel Núñez dentro de la Feria de Jóvenes Emprendedores en la Escuela Carlos Pereyra.

"Un producto que ya era considerado basura se puede volver útil nuevamente, se tira mucha lona al mes y ya no se vuelven a usar, entonces, ver cómo se apilaban fue lo que nos motivó a crear estos productos, que pueden ser muy útiles, es un material resistente, las bolsas se pueden usar para mandado, la mochila para libros, computadoras", comentó José Manuel.

Consideró que en Torreón existe mucha vocación y talento para emprender nuevos negocios pero es complicado el proceso detrás.

Emiliano Salais, Daniela Yaveli, Marifer Chávez, Adolfo Muñoz y Hernán de la Garza generaron una empresa dedicada a la fabricación de mobiliario a base de tarimas de madera, con productos de hogar y oficina, para venta, así como otros para jardín y exterior, en renta.

"Son tarimas desechadas y podemos lograr hacer productos con ellas, sacarle un provecho, nos motivó a esto el que somos una generación nueva y en el mundo vivimos cosas muy difíciles, queremos sacar adelante nuestra economía pero también ayudar al planeta", expresó Hernán.

Otros productos que se presentaron fueron una avena instantánea con mejores propiedades a la tradicional y en 15 segundos; productos para mascotas con material reciclado; un desodorante con estuche permanente; una máquina despachadora de productos de limpieza; muebles hechos con todo tipo de material reciclado; hojas reutilizables; y block con residuos plásticos.

Armando Limón Fematt, profesor de Administración en el sexto grado de preparatoria, explicó que el objetivo de la feria es enfrentar a los jóvenes a un entorno emprendedor de empresa, pero que no quede solamente en papeles o en conocimiento, sino que se ponga en práctica como una primera experiencia de lo que podrían vivir a diario, de modo que puedan llegar a impulsar su empresa.

"Durante todo el año van preparando su empresa, crean un producto, hacen todos los aspectos, se les evalúa en seis disciplinas, desde el aspecto legal, de recursos humanos, mercadotecnia, producción, administración y finanzas, y en general el concepto de producto", comentó.

Consideró que estos emprendimientos pueden llegar a la realidad, pues se han tenido experiencias exitosas, antes de la pandemia por COVID-19, ya que se hizo virtual durante los últimos dos años. Indicó que hubo dos equipos que lograron impulsar su producto y sacar adelante su empresa, unos por ellos mismos y otros lo patentaron, por lo que lo mantienen en renta.

"No todos, pero si de todos los equipos lo logran uno o dos, permitirá que se enfrenten a la realidad", dijo.

Limón Fematt dijo que anteriormente el proyecto de estudiar era para salir a trabajar, ser empleado en una compañía, pero dada la globalización y las nuevas formas de empresa, hay más oportunidades en el emprendimiento que en lo laboral, de ahí la importancia de que los estudiantes adquieran estas experiencias, además de que se les pidió que fuera con un toque ecológico.